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Foto: Coordinadora de periodistas en alerta.

16 de Febrero, 2015
Este lunes se cumplen cuatro meses del asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada, quienes fueron emboscados en un camino vecinal ubicado a 45 kilómetros de Curuguaty.
Pablo Medina, recibía constantes amenazas porque realizaba coberturas sobre el tráfico de drogas, pero ni el Ministerio del Interior ni su empresa le protegía con guardias.
Aquel 16 de octubre, Medina de 54 años de edad y su asistente Antonia Almada de 19 años se dirigían hasta la Colonia Ko'e Pora, distante a 45 kilómetros de Curuguaty, para realizar una cobertura.
Cuando regresaban, a bordo de un vehículo, alrededor de las 13:00, dos hombres armados y vestidos de paraparai le salieron al paso en un camino vecinal de la colonia indígena, situada ya muy cerca de Villa Ygatimi. Sin mediar palabras, efectuaron disparos que provocaron la muerte de Pablo Medina.
Autoridades fiscales realizaron investigaciones y tras varios allanamientos pudieron corroborar que el ahora ex intendente de Ypejhú Vilmar “Neneco” Acosta, estaba involucrado en el hecho y fue sindicado como autor moral del hecho.
Los fiscales también pidieron la captura de su hermano Wilson Acosta Marqués, con antecedentes por homicidio y orden de captura en el Brasil y de su sobrino, Flavio Acosta como autores materiales del asesinato.
El “Clan Acosta”, como los denominaron, se encuentran prófugos hasta la fecha y sobre los mismos pesa una orden de captura internacional.
El pasado 8 de diciembre la fiscalía logró capturar a Arnaldo Cabrera López quien se desempeñaba como chofer y hombre de confianza del ahora ex jefe comunal de Ypejhú.

Cabrera, confesó a la fiscal Sandra Quiñonez que “Neneco” Acosta estaba cansado de la persecución del periodista Medina, por lo que en el día de su cumpleaños decidió eliminar al periodista de ABC Color.
El corresponsal del diario ABC Color escribió sobre los supuestos vínculos del narcotráfico con algunos políticos locales como la diputada Cristina Villalba, del Partido Colorado, como una de las protectoras de la mafia de Canindenyú, y a Víctor Núñez, quien luego de las acusaciones tuvo que renunciar al cargo de ministro de la Corte Suprema de Justicia para no someterse a un posible juicio político impulsado por la ANR y el PLRA, en su contra.
El Clan Acosta asesinó a cinco personas con las mismas armas
Según las investigaciones del caso Pablo Medina, fueron utilizadas las mismas armas para ejecutar otros tres asesinatos en la misma zona, por lo que se concluye que el clan Acosta es responsable de los crímenes.
A través de una conferencia de prensa dio a conocer el resultado de la prueba de balística efectuada y que arroja que otros crímenes registrados en 2014, fueron el del ex intendente de Ypehú Julián Núñez, que ocurrió en agosto, y el de Policía Civil de nacionalidad brasileña, Marcilio de Souza, en febrero. La última víctima fue Teodoro Gonzalez Dominguez, asesinado el 29 de agosto.
http://www.paraguay.com/nacionales/120-dias-sin-justicia-123939