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18 de Octubre de 2015 08:29
Por Juan Carlos Lezcano F.

los-padrinos


Fiestas de cumpleaños, mítines políticos o recorridos por el departamento. Nunca faltaba la ocasión para que Vilmar “Neneco” Acosta Márques demostrara su cercanía con el poder. Sus padrinos políticos hoy siguen siendo del entorno cercano del presidente.

Aunque intenten negarlo, todo el departamento de Canindeyú conoce de la amistosa relación que tenía Vilmar “Neneco” Acosta Márques, autor intelectual del asesinato del corresponsal de ABC Color Pablo Medina y la joven Antonia Almada, con la diputada colorada Cristina Villalba y el gobernador Alfonso Noria Duarte. Tan cercana que en alguna fiesta de cumpleaños se los vio cantando juntos y quedó un registro fotográfico de la ocasión.

Eso sí, la diputada Villalba asistió dos veces al velorio de Pablo Medina y abrazó a varios familiares del periodista.

“Neneco” era sindicado como narcotraficante y responsable de decenas de muertes violentas incluso antes de ser elegido intendente de Ypejhú. Aún así, el Partido Colorado apoyó su candidatura y lo mantuvo en sus filas hasta semanas después de que se lo comenzara a vincular con el asesinato del periodista.

Acosta Márques construyó su influencia política, gracias al apoyo de influentes padrinos en la zona como Cristina Villalba y Alfonso Noria. Y trató de utilizar esa influencia para zafar de la investigación del asesinato de Pablo y Antonia.

De acuerdo a las investigaciones de la fiscalía, el sábado 18 de octubre, dos días después del crimen ocurrido hace un año, Vilmar llamó desde Ypejhú a Cristina Villalba que se encontraba en La Paloma, ambas ciudades del departamento de Canindeyú.

La comunicación duró 9 minutos y 18 segundos. Luego, aparentemente se corta la llamada y es allí que la diputada devolvió la llamada a “Neneco”. Esta comunicación duró 2 minutos con 41 segundos. En total la comunicación entre ambos duró 11 minutos, 59 segundos.

Villalba primero dijo que Acosta Márques le había llamado al día siguiente del crimen, para luego contradecirse. Además, aseguraba con insistencia que el exintendente “tenía miedo” y que ella sabía de la posibilidad de que vincularan a su correligionario con el doble asesinato por revelaciones mediáticas. Al momento de la llamada, no se había hablado siquiera de Neneco como sospechoso. La diputada llamó enseguida al fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, supuestamente para tratar de abogar por él.

Durante los días posteriores al asesinato de Pablo y Antonia, Villalba hablaba maravillas de Neneco y su trabajo como jefe comunal. Una versión que fue cambiando con el tiempo, mientras intentaba separarse cada vez más de quien hoy intenta evitar de cualquier manera su extradición de Brasil.

“Neneco fue producto de una interna en el Partido Colorado, todo tuvo un proceso”, repetía. Para tratar de desmarcarse más, llegó a borrar todas las fotos en las que aparecía junto a Acosta Márques, aunque lo hizo después de que las mismas fueran descargadas y reproducidas varias veces.
Los todopoderosos de Canindeyú

Cristina Villalba y su hermano, Carlos “Cabrito” Villalba, eterno intendente del distrito de La Paloma, son los todopoderosos de su departamento y fuertes aliados políticos de Cartes. Es por eso que la diputada se ganó el apodo de “La reina del Norte”.

Si Cristina Villalba es considerada la reina de la zona norte del país, su hermano mayor, Carlos, podría ser sin ningún problema el “rey”. El intendente de La Paloma es considerado el hombre más poderoso de todo Canindeyú, donde su padrinazgo casi no cuenta con oposición. Arrastra con él una larga historia de denuncias de actividades ilícitas.

El intendente de La Paloma estaría presuntamente involucrado en el contrabando de mercaderías al Brasil, siendo uno de los principales rubros el cigarrillo, aunque se le suman otros como insumos agrícolas o electrónicos.

Villalba López ya fue denunciado por sus cercanas vinculaciones con Claudecir da Silveira, alias “Mano”, un brasileño con orden de captura que vive protegido en territorio paraguayo desde hace años y sindicado como uno de los principales líderes de una poderosa mafia que domina en la zona fronteriza el tráfico de cocaína, armas y hasta animales.

Sus detractores afirman que su padrinazgo sin discusión se basa en presiones a sus opositores.
Se sabía

El exdiputado colorado Julio Colmán había indicado que el expresidente Nicanor Duarte Frutos y el actual, Horacio Cartes, conocían las vinculaciones de los Villalba con actividades ilícitas en Canindeyú.

Colmán señalaba, además, que durante la campaña de Cristina Villalba para la Cámara de Diputados se utilizaron más de 30 vehículos robados en Brasil y que Carlos “Cabrito” Villalba amasó su fortuna gracias al tráfico de rodados que ingresaron al país de manera irregular. “Es el más famoso de los importadores de vehículos mau en Paraguay”, expresó. Aseveró, además, que el mismo cuenta con prohibición de ingresar al vecino país.

Carlos Villalba apareció en el escenario político hace ya casi dos décadas cuando en 1996 ganó por primera vez las elecciones municipales en La Paloma, un distrito ubicado a unos 380 kilómetros de Asunción. A partir de ahí, construyó un padrinazgo político casi indiscutible en todo el departamento de Canindeyú apoyado en un poderío económico que fue en aumento exponencial desde que asumió la jefatura comunal.

Desde entonces, Villalba gana por goleada todas las elecciones y casi nadie se anima a enfrentarlo en la arena política. En varias oportunidades obtuvo el 80 por ciento de los votos en la puja por la seccional local. La única ocasión en la que perdió fue cuando en 2001 trató de cederle el lugar en la Municipalidad a su hermana Cristina, actual diputada conocida como “La Reina”.

Avelino Rivas Jiménez, colorado de ascendencia oviedista y el que había “arrebatado” la intendencia a los Villalba en 2001, reconoció en varias oportunidades esta realidad y señalaba que es imposible competir con una persona que maneja a todos con su fortuna malhabida, que logró gracias a la impunidad.

En aquel año, Villalba fue visto protagonizando una pelea callejera con seguidores del otro movimiento político que dejó como saldo varios heridos.

Investigadores privados de Brasil llegaron a calificar a Villalba López como el supuesto “Beira Mar paraguayo”, en alusión al detenido Fernandinho Beira Mar, quien fuera uno de los hombres más buscados en su país por narcotráfico.

En 2012, el intendente de La Paloma protagonizó un hecho bastante particular al ser acusado de haber amenazado de muerte a su par de Salto del Guairá, el también colorado Eduardo Paniagua Duarte.

“Nde ningo reikuaa porã che mba’eichaguávapa. Hetápema amboviajá, ha remakanea ha ndéve avei romboviajáta” (vos sabés bien qué clase de persona yo soy. Ya les hice viajar a muchos y si macaneás, a vos también te haré viajar), me dijo”, señaló el intendente saltoguaireño.

Por si estos antecedentes no fueran suficientes, el narcotraficante Ezequiel De Souza también vinculó a los Villalba con el “negocio”.
De profesor a millonario gobernador

Cuando comenzaron los cuestionamientos a Cristina Villalba, su correligionario, el gobernador de Canindeyú Alfonso Noria Duarte, se encargó de organizar raudamente un mitin político para presentar su apoyo a la legisladora. Estuvieron presentes varios intendentes de un departamento ampliamente dominado por los colorados y, en particular, por los Villalba; además de funcionarios de las diferentes comunas que fueron obligados a asistir.

Noria experimentó un llamativo y meteórico ascenso desde que asumió el cargo, hace un año. Levantó una mansión de US$ 3 millones en un predio de cinco hectáreas en una de las zonas más caras de Curuguaty.

Noria Duarte, de 35 años, apareció en el escenario político del departamento de Canindeyú en el año 2006, cuando sorpresivamente ganó las elecciones municipales de Curuguaty de la mano de los principales referentes de la línea política del expresidente Nicanor Duarte Frutos, entre ellos el polémico exdiputado Julio Colmán.

Se inició como licenciado en Ciencias del Deporte, título que le valió para enseñar, por ejemplo, en la escuela y colegio Fortuna de Curuguaty.

Tanto Noria como los Villalba siguen alineados a filas del oficialismo sin que se haya escuchado siquiera un cuestionamiento por parte del presidente hacia ellos. Además, visitaron varias el Palacio de Gobierno.

Se podría pensar que con todo esto, el presidente de la República, Horacio Cartes, quien repite tan insistentemente su discurso de un nuevo rumbo para la política, trataría de desligarse de figuras como éstas. No, no hizo siquiera el más mínimo intento. Muy por el contrario, se pasa demostrando su cercanía con ellos.

Apenas días antes de que se recordara el primer aniversario del asesinato de Pablo Medina y Antonia Almada, el presidente de la República, Horacio Cartes, no tuvo problemas en mostrarse a los abrazos con Villalba y Noria. Es más, durante la visita del papa Francisco, se encargó de presentar personalmente a la diputada al máximo líder de la Iglesia Católica.

Además, el movimiento oficialista Honor Colorado se encargó de impulsar la candidatura a la intendencia de La Paloma de “Kiko” Villalba, el menor de los hermanos Villalba, que pretenden seguir manteniendo el poder en su bastión por un largo tiempo.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. - @juankilezcano

http://www.abc.com.py/especiales/fin-de-semana/los-padrinos-de-neneco-1418205.html