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rosasobrecruzPor Sandra De Marco

“Esclavo del Espejo mágico, sal de la oscuridad, vuelve de la eternidad. A través del viento y del fuego... ¡Yo te invoco! Muéstrame tu rostro. Espejo Mágico, tú que cumples mis deseos ¿quién es el más cristiano del reino?”

¡Tenemos que admitirlo, aún no hemos abandonado ese vicio! Es un mal sutil y persistente que se insinúa en nuestra cotidianidad. La caza de brujas, de los malvados, de los falsos profetas hoy no deja en evidencia las distinciones de época o de territorio: ha quedado intacta, simplemente ha evolucionado, ha cambiado su semblante. Esa tendencia de querer encontrar a toda costa un chivo expiatorio en quien proyectar nuestras miserias, nuestros pecados y miedos, una inquisición moderna más solapada y ubicua para desviar la mirada de nuestras consciencias.

Además es una tradición antigua la de querer emitir juicios de valor tomando como medida nuestro estrecho y cómodo punto de vista, ese deseo de querer sonsacar a toda costa algún indicio, algún enemigo, algún enredo mezclado con algo de verdad para enderezar el cuadro perfecto de una fe más que imperfecta, para parecer más buenos, mejores, más cristianos.

Y siempre está allí, al acecho, ese morboso deseo de vernos, de compararnos, de saber... con mirada alerta, severa, sospechosa, apuntando el dedo, conteniendo la respiración, a la espera de descubrir dónde se anida el origen de tanto mal y de tanto horror. Nosotros, los cristianos, con nuestras decisiones de vida evangélicas, en la espasmódica y constante espera de un momento que está por llegar, que siempre queda relegado por algo más, no se sabe bien, no se sabe cuándo, no se sabe cómo...

Nosotros, los cristianos, somos más ricos que el rico epulón y que Job, henchidos de Verdades cósmicas, embriagados por años de estudio y perlas de gnosis... que no dejamos que pasen unas horas sin quejarnos de algo, con nuestros asfixiantes victimismos y frustraciones. Nosotros que reconocemos en el Hijo del Dios Viviente el Camino, la Verdad y la Vida para luego refugiarnos detrás de un montón de dudas, incredulidades y de grandes conflictos de interés...

Nosotros, que ostentamos la Cruz y que vivimos empañado y desgastado, aferrados a nuestras costumbres, a la familia, a nuestras seguridades, no inmunes a la búsqueda de ese tipo de religiosidad autorreferencial y narcisista, cubierta por las buenas intenciones y frenéticamente acompañada de irreprochables motivaciones...

Nosotros, que estudiamos a los profetas, que embebemos a Cristo en la cena, en el almuerzo y en el desayuno y que le ofrecemos a nuestros hijos como alimento y al mundo entero un modelo de vida cristiano incoherente, para luego asombrarnos cuando no nos siguen o no nos creen.

¡Nosotros! ¡Nosotros! Que nos postramos ante las inequívocas Señales en el Cielo y en la Tierra, testigos de milagros, en la búsqueda desesperada de respuestas recubiertas de gracia y de gloria. Nosotros, que nos jactamos con soberbia de querer luchar en contra de toda forma de mal, desenfundando esa microscópica partícula de fe que rebota cada vez que respiramos.

Si, nosotros, que corremos el riesgo de vivir como niños subidos a los caballitos de madera de la calesita de la vida, en medio de subidas y bajadas vividas sin atrevimiento, sin haber tenido jamás la fuerza de descender, de apartarnos, de hacer seriamente Su Voluntad, de ir en contra de la corriente y en contra de nosotros mismos.

¡Tenemos que tener cuidado! El Verdadero Espejo Mágico camina entre nosotros, tiene miles de ojos, miles de oídos, miles de reflejos, es la perfecta imitación de Cristo, sin peros!

Si, tengamos cuidado, porque tarde o temprano la tierra se caerá en esta gigantesca ronda: pocos heredarán el Nuevo Reino y nosotros estamos a punto de encontrarnos aquí gozando del violento brazo de ese Dios a quien nunca hemos querido imitar a fondo, sino que en realidad hemos intentado adecuarlo a toda costa a nuestra imagen y semejanza.

PORDENONE - 25 DE FEBRERO DE 2017

Giorgio: ¡El aspecto más importante de nuestra misión es anunciar la Segunda Venida de Cristo! Hoy, durante la sangración, recibí un mensaje según el cual os tenía que explicar, en un lenguaje actual, el Capítulo 24 del Evangelio de Mateo, seré sintético, luego me podréis hacer preguntas al respecto. No podéis poner en duda lo que está escrito porque es Jesús, inspirado por Dios, por lo tanto el mismo Dios, quien está hablando, al máximo me podéis pedir mayores explicaciones.

Capítulo 24: “Cuando salió Jesús del templo, y se iba, se le acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo. Mas respondiendo Él, les dijo: ¿Veis todo esto? En verdad os digo: no quedará aquí piedra sobre piedra que no sea derribada. Y estando Él sentado en el monte de los Olivos, se le acercaron los discípulos en privado, diciendo: Dinos, ¿cuándo sucederá esto, y cuál será la señal de tu venida y de la consumación de este siglo?”

¡Cuando Jesús afirma que no quedará piedra sobre piedra se refiere a Jerusalén que será destruida por una explosión nuclear o, si el Cielo lo llegara a evitar, será arrasada por un terremoto de 8 grados de la escala de Richter!

“Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: ‘Yo soy el Cristo, y engañarán a muchos’.”

Jesús se refiere a los falsos profetas y al fracaso de la Iglesia católica que traicionó a Cristo, no solo a los charlatanes o a esos personajes que engañan y que creen tener visiones. Él habla de todos aquellos Príncipes, Cardenales, Papas y líderes de la Iglesia católica que, a lo largo de dos mil años, han utilizado el poder temporal de la misma. Sin embargo, en este contexto, hay que distinguir el poder temporal del espiritual. A este último lo encontramos en San Francisco, en los Santos, en los curas misioneros, en el Padre Pio y en todos aquellos, conocidos o no, que trabajan en silencio en la Iglesia espiritual. Cuando Cristo habla de falsos profetas no se refiere a estos últimos. Tampoco tenemos que buscar a los falsos profetas en las demás religiones, como el Islam, etc., etc., no somos nosotros quienes las tienen que juzgar. El Islam no viene en nombre de Cristo, tampoco Buda. Nosotros ni siquiera podemos juzgar a las disciplinas de las religiones orientales, al máximo podemos venerarlas. Cuando Jesús dijo que teníamos que tener cuidado porque muchos vendrían en ¡Su nombre se refería a quienes llevan una cruz colgada, a la Iglesia católica que ha fornicado, asesinado, estuprado, violado y fomentado guerras! No tenemos que tener cuidado con los videntes, con los misioneros, con los pastorcillos que ven a la Virgen: ¡yo mismo soy un hombre simple! Hay que tener cuidado con los que engañan y dicen: “¡En nombre de Cristo, te mato! ¡En nombre de Cristo, dame todo tu dinero! Yo represento a Cristo y te digo...” ¡Estos son falsos profetas!

“... Mirad que nadie os engañe. Porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: ‘Yo soy el Cristo’, y engañarán a muchos”... ¡Mil millones de personas!

“Y habréis de oír de guerras y rumores de guerras. ¡Cuidado! No os alarméis, porque es necesario que todo esto suceda; pero todavía no es el fin”... Veremos guerras, a partir de este año y en los años por venir, muerte y destrucción, incluso entre nosotros. Tendremos miedo, entraremos en pánico.

“¡Cuidado! No os alarméis, porque es necesario que todo esto suceda”. ¡Entonces no me pidáis que ruegue en contra de las guerras! ¿Qué puedo evitar con mis oraciones si Jesús ha dicho que es necesario que todo esto ocurra? ¡Si yo rezara para que no ocurra todo lo que tiene que ocurrir os estaría engañando! Significaría que no estoy cumpliendo con la Voluntad de Cristo. ¿Se que es difícil de comprender pero tengo que interpretar el Evangelio, de lo contrario cómo haríais? Puede ser que esté llegando el momento en el que me tenga que ir al Cielo y por lo tanto os tengo que explicar todo.

“… Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino, y en diferentes lugares habrá hambre y terremotos”. Y bien, esto aún no ha ocurrido. Habrá guerras civiles, regionales, quizás hasta incluso aquí en Italia, quiere decir que seremos atacados. La crisis de Medio Oriente llegará hasta aquí y habrá guerras convencionales en las que morirán muchas personas. Habrá epidemias, virus resistentes a todo fármaco, que matarán a millones de personas, carestía en varios lugares... Luego el Señor dijo algo escalofriante:

“... Pero todo esto es sólo el comienzo de dolores. Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis odiados de todas las naciones por causa de mi nombre...” Quiere decir que cuando me pedís que ruegue para que podáis recibir la providencia me estáis obligando a decir: “¡Señor, perdona a ese hermano! No ha comprendido, no porque no Te ama, sino porque no ha comprendido que nosotros tenemos que morir por Ti y ser perseguidos, volvernos pobres, miserables, quizás hasta inclusive arrestados y asesinados. ¡Ya que, Señor, esto es lo que quieres de nosotros! Perdona a mi hermano, yo finjo rezarte para que él reciba la providencia y la salud aunque en el Evangelio Tú digas que nos entregarán a tribulación y nos matarán”. No tenéis que creer que el hecho de ser asesinados tenga que ver únicamente con la muerte física, que sin embargo es una liberación. Matar significa además la muerte civil, ser aislados, aquella a la que Jesús define como la peor, una voz que grita en el desierto hoy está aquí con vosotros. Nosotros estamos solos, las personas no siguen nuestra causa, a pesar de que lean nuestros artículos, de lo contrario ya habríamos derrotado a la mafia y superado todas las tribulaciones. Jesús habló hace 2000 años, hoy tengo que explicaros qué es lo que significan Sus palabras. ¡Esta verdad infunde terror, yo también tengo una familia, pero Cristo quiere que nos ocurra todo esto!

“... Muchos tropezarán entonces y caerán, y se traicionarán unos a otros, y unos a otros se odiarán”... ¡Nosotros tenemos que hacerlo! Mahoma dijo que Cristo es un profeta, el Papa afirmó que Cristo es el hijo de Dios. ¡Israel cree que Dios nos ha creado a todos y que es el Dios de todos, incluso el nuestro, pero se matan unos a otros!

“... Y se levantarán muchos falsos profetas, y a muchos engañarán. Y debido al aumento de la iniquidad, el amor de muchos se enfriará”... Nosotros hemos sido engañados por muchos falsos profetas: la bomba atómica, los Presidentes, la política, el dinero.

“... Pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo”... Eso significa que nosotros tenemos que sufrir todo eso y ahora os lo he explicado y si perseveramos hasta el final nos salvaremos. Si en cambio no nos pasa nada, porque de hecho hasta ahora no ha ocurrido nada, no nos salvaremos. Las voces que gritan en el desierto tendrán la salvación, así como todos aquellos que sean perseguidos, aislados, arrestados, encarcelados, asesinados y despojados de todo. Si Jesús viniera hoy y nos encontrara con un mínimo de bienestar no nos salvaremos, ya que no entramos en esa categoría de personas a las que Él les decía: “os ocurrirá todo esto por causa de mi nombre”.

Y si alguien me dijera: “-Yo no me habría negado si hubiera sido perseguido, aislado, etc, por su causa...”, le respondería: “-¡Pero ni siquiera te has ofrecido!”. Si Jesús no me hubiera llamado para ser un estigmatizado, habría ido a buscarlo: “¡Jesús! ¿Dónde estás? ¡Ven aquí, dime que puedo hacer por Ti! Dime qué puedo hacer, lo que sea… Puedo lavarte los pies, quiero seguirte y ser asesinado por Ti!” Jesús me habría respondido como hizo con el rico epulón, que se fue porque el Señor le había pedido demasiadas cosas.

Ahora os quiero dar un consuelo: sigamos adelante con lo que estamos haciendo, sin arrepentirnos jamás de ello, deseando que todo empeore. No me refiero al éxito de la difusión, o de la Obra: sería una señal negativa. Tenemos que ser escuchados por muchas personas, a través de las obras que estamos realizando: ayudar a los niños, difundir el mensaje espiritual y la lucha en contra de la mafia. ¡Tendremos que llegar a muchísima gente, pero no podemos ser reconocidos! Nuestro destino tiene que ser que quedemos apartados hasta  el Retorno de Cristo y si no damos la cara por esto no estaremos con Él! No os estoy dando un mensaje que he recibido del Cielo y que, si bien nunca tengo dudas, podría ser hasta incluso discutible. ¡No soy el Mesías pero lo que dice el Evangelio es indiscutible! Al máximo se puede estudiar mejor pero es la Verdad, es Su palabra. ¡Durante muchos años he postergado el hecho de tener que dar estas explicaciones, ahora el tiempo ha llegado!

“Pero tened cuidado”... Proteged vuestra integridad espiritual.

“Os entregarán a los tribunales religiosos...” Esto es interesante no habla de tribunales civiles.

“Seréis llevados delante de gobernadores y reyes por mi causa, como un testimonio a ellos y a los gentiles…”. Cuando Jesús dice “Yo”, se refiere a la Verdad. Cristo afirma: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”, por lo tanto tendréis que presentaros ante los tribunales “por mi causa”, es decir, tendréis que decir la Verdad, porque la causa de Cristo es la causa de la Verdad! Los gobernadores y los reyes de aquel entonces son los poderosos, las sociedades gobernadas por estos individuos, los gobiernos y los sistemas criminales de hoy. Cuando Jesús dice “vosotros” se refiere a todos aquellos que quieren decir la Verdad y que lo hacen públicamente para liberar a las personas de la esclavitud. Es exactamente lo que tenemos que hacer, ya lo estamos haciendo con nuestras posibilidades y tenemos que estar felices por ello. Es más, digamos: “¡Señor, cuanto más mal me la haces pasar con tal de hacer la Obra más contento me siento!” Si nos damos cuenta de que las cosas están saliendo bien mientras trabajamos para la Obra, quiere decir que hay algo que no funciona. Si alguna vez Dios llegara a cometer el grave “error” de darnos un poder habría que utilizarlo solo en la causa de la Justicia como objetivo.

Cuando Cristo hacía profecías cada tanto hacía algunas excepciones. A veces Dios le da a algunos de Sus hijos un poder, o los medios necesarios para cumplir con un proyecto. El nuestro es el de seguir a Cristo, de decir la Verdad, a pesar de que seamos perseguidos y burlados, pero en el momento que Dios decidiera usarnos a nosotros como Su Espada de la Justicia nos convertiremos inclusive en instrumentos de la Justicia Divina. Esto no está ocurriendo, nosotros somos unos humildes servidores, nos endeudamos, hacemos todo lo posible, pero si Dios nos diera el poder éste sería una gran prueba y honestamente no se si lograremos superarla. Espero que Él no nos lo de porque no estamos preparados. El poder se nos subiría a la cabeza, si el Señor llegara a decidirse y nos diera un poder económico o político os pido que me lo digáis y yo os ayudaré a hacer justicia, no a gozar de la potencia que hemos recibido. Si llegarais a recibir una donación de cincuenta mil millones de euros significaría que los tendremos que gastar por completo para atacar al anticristo, sin poder conservar nada para nosotros mismos, solo el pan para nuestros hijos y una morada en la cual poder dormir.

“... Y el hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y les causarán la muerte” ¿Cuántos jóvenes están matando a sus padres? Por más que sea un drama la noticia es “buena” porque esta señal anuncia que Él está por regresar.

“... Por tanto, cuando veáis la abominacion de la desolacion, allí donde no tendría que estar (el que lea, que entienda), entonces los que estén en Judea, huyan a los montes; el que esté en la azotea, no baje a sacar las cosas de su casa; 18y el que esté en el campo, no vuelva atrás a tomar su capa...” La abominación de la desolación allí donde no tiene que estar es la crisis de Medio Oriente, Jerusalén, la guerra que ya está en curso desde hace décadas y que desembocará en una guerra atómica. Cuando veamos que estas cosas ocurren Jesús nos invita a ser extremadamente espirituales, a renunciar a todo. En el extremismo de Su explicación Cristo dice hasta incluso que las mujeres embarazadas tendrán problemas, por lo tanto tendréis que renunciar a tener hijos. ¡Lo afirma para darnos a entender que ocurrirán cosas terribles!

“... Porque habrá entonces una gran tribulación, tal como no ha acontecido desde el principio del mundo hasta ahora, ni acontecerá jamás”. ¡Es muy claro! Jesús se refiere a las armas atómicas, tenemos que estar preparados para la guerra nuclear! Cristo, Dios manifestado, es el único Profeta que no tiene posibilidad de error. Es decir que no tenemos que tener sueños inútiles y estúpidos: nuestro objetivo es el de decir la Verdad a las personas, el de derribar el muro del silencio, para que liberen sus almas con el conocimiento de la Verdad. ¡Luego nos tenemos que preparar para lo que tiene que ocurrir porque será inevitable! ¡Nuestros proyectos no tienen que ser improvisados, nuestros hijos tienen que crecer y estudiar pero siempre siendo conscientes de que estas cosas ocurrirán inexorablemente! Es por ello que es fundamental permanecer unidos, existir solo por nuestra Causa, por esta Obra. Nosotros tenemos que vivir al día, con nuestro trabajo y sobrevivir, hacer las compras y tener un sueldo, pero el objetivo no es el que nos ha inculcado la falsa información. ¡Nuestros hijos no tendrán nada, solo el invierno nuclear! ¡A partir del momento en el que uno es consciente de que todas estas catástrofes ocurrirán por Voluntad Superior, si creo en la presencia extraterrestre tendré que trabajar por la salvación espiritual y física, pero tenemos que merecerla! Merecernos la salvación significa además trasladarme durante diez años en bicicleta y comer de la basura, con tal de decir la Verdad, renunciar a un futuro personal, a una carrera, a proyectos de vida extraordinarios, ya que soy consciente de lo que está por ocurrir.

¡Si quiero ir al Nuevo Reino todo lo que puedo hacer hasta el fin de mis días es decir la Verdad! No hay otro camino.

“... Y si aquellos días no fueran acortados, nadie se salvaría; pero por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados...” Nosotros no somos los Elegidos, podemos ser sus servidores y si perseveramos en la Obra podríamos hasta incluso llegar a convertirnos en uno de ellos. ¿Qué puede ser tan terrible, más allá de los terremotos y de las guerras nucleares, que tenga  que ocurrir hasta el punto tal de que si esos días no fueran acortados ni siguiera los Elegidos, que son perfectos, se salvarían? ¡El canibalismo será moneda corriente! Las personas venderán a sus parientes y amigos, niños inclusive, a los restaurant en los que se comerá carne humana, a cambio de algo de dinero para comprar droga, etc. Todo esto ocurrirá aquí en el Occidente, no en África, se comerán hasta los niños porque es carne fresca y se comprará en las carnicerías. Pero lo ha dicho Jesús y además Él me ha preguntado: “-Entonces querido Giorgio, discípulo Mío ¿tengo derecho o no a destruir la humanidad?” Y mi respuesta fue: “-¡Si, Señor, hazlo rápido, antes de que ocurra todo eso!” Os lo estoy profetizando: ¡cuando escuchéis la noticia de que la policía ha descubierto que hay restaurant en los que se sirve carne humana será el inicio del fin! Pero el Padre no lo permitirá, a excepción hecha de algunos casos, ya que acortará los días, es decir, desencadenará el Diluvio y luego regresará Su Hijo!”

“... Entonces estad atentos, ya os he anubciado todo. En esos días, después de la tribulación, el sol se oscurecerá, la luna no dará su luz, las estrellas caerán del cielo y las potencias de los cielos serán sacudidas...” La profecía de los tres días de oscuridad es real. La luna ya no dará su luz, como consecuencia del oscurecimiento del sol. Las estrellas del cielo son nuestros Hermanos: Jesús utiliza esta metáfora para profetizar el contacto con los Seres de otros mundos, es decir, con Sus Ángeles.

“... Entonces verán al Hijo del hombre que viene sobre las nubes con Potencia y Gloria.  gloria.  Y Él enviará a sus ángeles con una gran trompeta y reunirán a sus escogidos de los cuatro vientos, desde un extremo de los cielos hasta el otro...” Todos aquellos que sean dignos se encontrarán en el Día que venga el Señor.

“... Y de la higuera aprended la parábola: cuando su rama ya se pone tierna y echa las hojas, sabéis que el verano está cerca. Pero de aquel día y hora nadie sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo, sino sólo el Padre...” Si alguien dice alguna fecha es un falso profeta.

“¡... Estad atentos! Ya que al igual que aquellos siervos tampoco vosotros sabéis el día ni la hora. El Cielo y la Tierra pasarán pero Mis Palabras no pasarán. Todo acontecerá antes de que pase esta generación”. ¡Una generación, según un aspecto astrológico y cósmico dura aproximadamente 2050 años, por lo tanto el Retorno de Cristo ocurrirá, 100 % seguro, en el siglo XXI! Os digo todo esto en Verdad y estoy dispuesto a dar la vida. No conozco la fecha pero el Cielo me lo ha revelado. Cristo podría regresar en 2099, pero también hoy mismo. Todavía tienen que llegar los grandes acontecimientos, sin embargo por voluntad de la Santísima Madre nosotros siempre tenemos que vivir como si Él estuviera por regresar esta noche, mañana o dentro de algunos años. Si esto se llegara a cumplir no se desencadenarían los acontecimientos terribles, pero en ese caso será la Voluntad de Dios la que nos daría esa gracia. Si Jesús no regresa pronto, sino más adelante, en cambio ocurrirán catástrofes de todo tipo: terremotos, maremotos, pestilencias, conflictos, guerras nucleares, fraticidas, traiciones y canibalismo. ¡Entonces tenemos que prepararnos! No tenemos que comportarnos como algunas sectas fanáticas que se encierran en un lugar acumulando alimentos y provisiones para permanecer aisladas del mundo. Nosotros tenemos que hacer exáctamente lo contrario: insertarnos en la sociedad, dar la cara y decir la Verdad, precisamente porque sabemos lo que tiene que ocurrir. Es inminente liberar a las personas de la esclavitud de la ignorancia en la que viven, en todo sentido: espiritual, social, etc. No podemos encerrarnos en el Arca para esperar la llegada del platillo volador que nos venga a buscar. Para salvar nuestro espíritu no tenemos que buscar la salvación física, sino la muerte física. ¡Nosotros tenemos que morir en el campo de batalla!

Este año es el centenario de las apariciones de Fátima. Tenemos que ser fuertes, permanecer unidos, hacer proyectos que estén en armonía con lo que dijo Jesús en el Capítulo 24 del Evangelio de Mateo. No tememos por nuestra vida física, no nos tenemos que preocupar por las cosas que nos puedan llegar a faltar. Nosotros tenemos que tener fe. Si servimos a Jesús Él nos dará todo lo que nos haga falta para lo que nos toque hacer. ¡Si no lo hiciera será porque no tenemos fe! Estoy hablando de mi mismo, sobre todo. Si llegamos a tener miedo el Cielo no nos ayudará. Al contrario, tenemos que tener la alegría interior y ser conscientes de que el Cielo lo hará. No somos perfectos, ni mucho menos somos santos. Con estas palabras os estoy dando mi fuerza: es mi deber hacerlo y estoy contento por ello. ¡Pero hay días en los que ya ni siquiera creo en dios, o creo que Él nos ha abandonado! A veces yo también me dejo tentar por Satanás. Luego miro a Cristo, miro las Señales que están en mi cuerpo (vosotros las tenéis a nivel espiritual, en vuestros corazones) y rezo, tomo fuerzas, busco a mis hermanos y digo: “¡Querido Giorgio, has sido tentado, entonces recupera tu fe, mira las Señales que tienes en tu cuerpo y supera esta prueba!” A veces me digo a mi mismo: “Tienes que hacerlo inmediatamente”. Porque yo he visto a Cristo, a la Virgen, a los Seres de Luz, sangro, soy un guía, un punto de referencia, a vosotros que no los habéis visto os doy 24 horas de tiempo para arrepentiros. Si yo no lo hiciera en el lapso de un minuto Cristo me tacharía de la lista blanca de Sus elegidos y me arrojaría al fuego del infierno, a la segunda muerte. Hermanos, tenemos que prepararnos para cuando lleguen los acontecimientos, tenemos que estar unidos, tenemos que tener confianza entre nosotros y no podemos sacar las manos del arado. Jesús me ha revelado que mientras estas Señales estén presentes (los estigmas) Él estará y perdonará nuestras debilidades, por lo tanto tenemos que seguirlo. Me dirijo a mi mismo, me estoy hablando al espejo: “¡No te rindas! Mientras Cristo esté presente en tu cuerpo y en tu alma no te puedes rendir, tienes que seguir adelante”. ¡Un Padre pone a prueba a Sus verdaderos hijos, pero jamás los abandona!

Más adelante  retomaremos esta lección espiritual ya que esta tarde no os he dado algunos detalles relativos a lo que nos ocurrirá a nosotros, a causa de nuestro testimonio de la Verdad, antes de Su venida. No competen a la humanidad con la que nosotros estamos involucrados (canibalismo y mucho más). Nosotros tenemos que dar un salto cualitativo: tenemos que pedirle al Señor que nos de los medios para poder hacer la Obra y si no queremos morir, nos tenemos que pedir a nosotros mismos vivir exclusivamente por la Causa de Cristo. Tendríamos que preguntarnos si hay algo más que nos haga sentir vivos, más allá de la Obra, si existe quiere decir que deberíamos ser honestos y reconocerlo interiormente, reconocérselo a Dios y, si queréis, también a mi. En ese momento el Señor os dirá: “No eres digno de entrar en el Reino de los Cielos”.

Tenemos que permanecer juntos, unidos, no pensar que entre nosotros existe el mal, tener siempre una actitud positiva, sonreír, amarnos, hasta incluso gritar y enojarnos cuando nos hacen sufrir, pero para luego volver a estar felices. En mi casa he impuesto que sean felices, eso no quiere decir estar locos, ya que en este mundo es difícil serlo. Pero es una forma de decir para explicaros que, por más que tengamos derecho a vivir un momento trágico en nuestras vidas luego se nos tiene que pasar. Es legítimo que nos sintamos tentados, que tengamos problemas que no sepamos resolver, que nos quejemos, que lloremos, que nos enojemos, pero luego todo eso tiene que quedar superado y tenemos que seguir adelante. En las Arcas tenemos que estar cada vez más unidos y programar todas las actividades posibles e imaginables: conferencias, reuniones y vencer al mundo, como lo hizo Jesús (“Yo he vencido al mundo”). ¡Gracias!

P: ¿Por qué motivo la gente llegará a comer carne humana?

Giorgio: Las personas tendrán la posibilidad de comer todo tipo de comidas, pero de todos modos tendrán que nutrirse con carne humana porque estarán endemoniadas. Se trata de una perversión, te digo más: Trump ha declarado que los Estados Unidos tendrán que invertir 400.000 millones de dólares para el rearme nuclear. ¡Rusia ha tomado esta afirmación como una declaración de guerra! ¿Alguna vez os habéis preguntado cómo puede ser que la gente no haya salido a las calles para protestar? ¿Qué futuro le espera a millones de niños norteamericanos que nacerán deformes? ¡Un canibal es un loco y tenemos que tratarlo, pero Trump es incurable y esto me da más miedo que el canibalismo porque él es el dueño del mundo! ¡Y lo más preocupante es el hecho de que nadie diga nada! ¡La gente cree que él es un estúpido, pero lo hará.

P: Si Satanás me dijera que Dios no existe le respondería que por lógica él tampoco existe.

Giorgio: Tú puedes hacer este tipo de razonamiento porque eres una persona que tiene fe, que es inteligente, así como lo son nuestros hermanos de las Arcas y mucha gente más a la que no conocemos, pero hay miles de millones de personas que están convencidas de que Dios no existe.

P: Ante todo quiero decir que me siento honrado y te estoy muy agradecido por que nos consideres merecedores de una especie de reconocimiento por parte de las Estrellas, de los Hermanos, por nuestra presencia en este camino. El 15 de Agosto de 2016 nos habías definido, refiriéndote especialmente a los adultos y ancianos, incluído vos, como larvas carcomidas por la gangrena de la miseria humana y material. Prestando atención a lo que nos has anunciado esta tarde y a esta terrible condición interior y exterior nuestra quería saber ¿de qué ha servido hasta ahora y para qué podríamos servir? ¿Acaso el Juicio para nosotros los adultos ya está en curso?

Giorgio: Nosotros estamos condicionados por nuestras frustraciones materiales y psíquicas/psicológicas, determinadas por la pertenencia a esta sociedad. Por lo tanto para mi y para los demás hermanos será difícil despojarnos de todos los condicionamientos larvales que tenemos y así poder entrar en el Reino de Dios. No digo que sea imposible, pero si es difícil. A pesar de ello a nosotros nos ha ocurrido lo que ocurrió entre Cristo y el ladrón, por ello tenemos que estar agradecidos a Jesús. Frente al ladrón somos santos: no hemos asesinado, violado ni robado. Somos pequeños ladrones aceptados en el Reino de Dios por una situación de enorme Gracia Divina, pero no porque Jesús, en ese momento, es débil. El Suyo es un acto de justicia, la más grande de todas, porque encuentra en una persona con problemas materiales gravísimos aquello que no encuentra en Sus hermanos: ¡la fe y la disponibilidad!

Tenemos muchas larvas encima y será muy difícil liberarnos de ellas. No se si entraremos en el Reino de los Cielos pero todos nosotros, incluído yo, tenemos una suerte muy grande: si hoy estamos aquí es porque hemos visto a un hombre en la Cruz. A diferencia del otro ladrón que representa a la humanidad que ya está perdida nosotros pertenecemos a esa humanidad que Lo reconoce y que Lo ama. ¡Si el Señor nos pidiera que descendiéramos de la cruz y que nos rompiéramos las manos en Su nombre lo haríamos! Entonces Cristo dice: “¡Si, es cierto, sois miserables pero os llevaré al Paraíso porque me habéis defendido! Vosotros defendéis a la Verdad, habéis dado vuestra disponibilidad a la Verdad, a pesar de que sois un desastre igualmente os premiaré!” Tenemos que ganárnoslo. Es muy difícil pero si nos dirigimos a Jesús con la promesa de hacer Su voluntad hasta dar nuestra vida Él, a pesar de todas las miserias que tenemos, nos llevará al Reino de Dios. La clave es la disponibilidad, tenemos que preguntarle a Jesús: “Señor ¿qué quieres de mi? ¡Te daré todo lo que quieras!” Otras personas que no tienen nuestras miserias, ni nuestros pecados, pero que son muy puritanas, si vieran pasar al Señor frente a ellos ni siquiera Lo reconocerían! Nosotros, que somos un desastre, diríamos: “-¡Señor, entonces era cierto, eres Tu realmente!” A esta persona Jesús le respondería: “-Por ahora ven conmigo al Paraíso y luego te diré lo que quiero de ti”. Nosotros estamos aquí en la Tierra para servir al Señor. ¡Para nosotros el Juicio está en curso y cuando Él venga dictará Su sentencia! En este momento todos estamos siendo enjuiciados: hay un Fiscal que nos acusa y un abogado defensor que nos defiende (son metáforas para que podáis entender). ¡Jesús está controlando los hechos! Nosotros tendremos tiempo para recuperar y para hacer el bien hasta que Cristo regrese. Cuanto más acciones hagamos tendremos más posibilidades de ser absueltos entonces Él nos llevará consigo. Y tal vez, al final, descubriremos que todos los que se consideran perfectos tienen varios esqueletos en el armario. Nosotros estamos aquí para servirlo.

Tenemos que seguir el ejemplo evangélico del centurión romano que “se le acercó suplicándole, y diciendo: -Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, sufriendo mucho. Y Jesús le dijo: -Yo iré y lo sanaré. Pero el centurión respondió y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; mas solamente di la palabra y mi criado quedará sano. Porque yo también soy hombre bajo autoridad, con soldados a mis órdenes; y digo a éste: ‘Ve, y va’; y al otro: ‘Ven, y viene’; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. Al oír lo Jesús, se maravilló y dijo a los que le seguían: En verdad os digo que en Israel no he hallado en nadie una fe tan grande”. ¡Ese centurión era ateo, era un asesino, andaba con prostitutas, quizás era el hombre más asqueroso de la Tierra pero demostró su disponibilidad frente a Cristo! ¡El secreto de nuestra salvación, queridos hermanos, es la disponibilidad, no la cantidad de pecados que tengamos o no. si Jesús te pidiera que le des a tu hijo y lo hiciéras te salvarías, a pesar de que tu nombre sea Totò Riina, Él perdonaría todos los homicidios que has cometido! ¡Pero si no lo hiciéras iríais directamente al infierno por más que te llames Giorgio Bongiovanni y no hayas cometido ni un solo pecado! El secreto para seguir a Jesús de Nazaret es la disponibilidad.

P: ¿Qué puede ser más grave que inducir a un elegido, hasta incluso a ti Giorgio, a perder la fe y así terminar perdiéndose?

Giorgio: Satanás apunta a convencernos de que Dios no existe, no está de nuestro lado sino del lado de los poderosos, de los ricos, de los ganadores, de los campeones, de los talentosos, de los príncipes, de los reyes. ¡No de los débiles, ni de los últimos, de los perseguidos, no está del lado de quienes buscan la Verdad! ¡Y llegó casi a convencerme! A veces me dirijo al Consolador y le digo: “-Padre mío ¿hacia dónde estás mirando? ¿A quién estás protegiendo? ¡Te hago la guerra!” Es así como se puede perder un elegido. El Padre no me responde pero me muestra a Su Hijo y entonces digo: “-Creo en Ti Padre, porque Tu Hijo ha venido, de lo contrario no sería amigo Tuyo”. ¡En los billetes de un dólar hay una inscripción que dice “en Dios confiamos” y me pregunto cómo puede ser que Él bendiga a esa Nación, veo a los niños que son violados y a un Dios que permite que lo hagan! Entonces Él no me responde... y me muestra a Su Hijo: entonces ahí creo, ya que Jesús era amigo de los pobres, de los  perseguidos, era enemigo de los poderosos, odiaba a los ricos. ¡Este es el Dios que yo quiero!

El Padre no ha dicho que regresaría, se abstuvo de hacerlo, pero Jesús de Nazaret si lo hizo. Yo tengo confianza en este joven porque Él ha dado la vida. Dios no ha dado la vida por nosotros, se quedó en Su hermosa ermita pero el Hijo, otra parte de Dios, lo hizo.

Con estas metáforas quiero haceros entender que no me dejo engañar por Satanás. ¡Jesús Cristo será siempre mi punto de referencia en este mundo, inclusive si llegara a renunciar a esta Obra jamás traicionaré a Cristo! Él es nuestro amigo y lo ha demostrado. ¡Quiero que Jesús regrese, no que regrese Su Padre, porque a Él no lo conozco y se que regresará y hará justicia! Yo he visto a Jesús gritar: “¡Ay de vosotros escribas y fariseos!...” ¡Este es mi Dios! ¡Jesús no intentó entablar un pacto con Caifas sino que dio la vida por mi y yo quiero dar la mía por Él! ¡No podemos traicionarlo! Cuando tengo días oscuros me enojo con Dios, jamás con Jesús. Jamás dudé de Cristo, ni siquiera he insultado a la Santa Madre que es el Amor perfecto, misericordioso. ¡Ni siquiera pronuncio el nombre de la Virgen porque siento que doy asco! En cambio el Padre Adonay recibe muchos insultos de mi parte, Jesús, que es el Amor más grande de todos los Amores, no. Estas metáforas (de Giorgio) quieren dar a entender que no se puede llegar a Dios si no es a través de Jesús Cristo.

P: En el Antiguo Testamento una de las plagas que azotaron a los egipcios fue el exterminio  de los primogénitos ¿quién desencadenó este drama?

Giorgio: Todo lo que hizo Dios en el Antiguo Testamento lo hizo a través de las Fuerzas de la Naturaleza. Cuando Dios dio la orden de matar a los niños ese no era mi Dios. Si el Padre actúa utilizando las Fuerzas de la Naturaleza es diferente de lo que ocurre a través de la espada del hombre. Si pensamos en que de todos modos todo viene de Él, esa es otra cosa. Nosotros tenemos que comprender la metodología de Dios, que es el Padre de todos, hasta inclusive de Satanás. Entonces si le permite hacer ciertas y determinadas cosas significa que está llevando a cabo un proyecto tan amplio que para nosotros no es tan claro. No tenemos que odiar a Satanás sino combatirlo. Estamos con Cristo pero: “-¡Señor, hágase Tu voluntad!” Cuando le pregunto al Padre cuál es el motivo por el cual permite que todo esté tan mal Él no me responde ya que siente pena por mi y sabe que no comprendería Sus Planes Cósmicos. ¡Se que admira muchísimo mi sed de Justicia y anota mi nombre en Su Libro Eterno, pero el Padre no me explica porqué permite que exista el mal, a mi lo único que me dice es que tengo que combatirlo y nada más! Cristo, Su Hijo, regresará y pondrá todas las cosas en su lugar.

En lo que respecta al Viejo Testamento no tenéis que confiar en los ejecutores de Dios que mataban a los niños con la espada. Tenéis que confiar en ese Padre que eleva las aguas de los Océanos, que provoca terremotos, o que manda virus naturales que matan. A este Dios le tenemos que decir: “¡Eres Tu Señor, perdónanos!”

¡Si Trump, o Putin llegaran a lanzar bombas atómicas diciendo que han sido inspirados por Dios tenéis que saber que ese claramente no es nuestro Dios! Él simplemente lo ha permitido, pero es un plan desconocido! Nuestro Dios es Jesús Cristo que regresará y detendrá a Putin y a Trump. El Padre es el árbitro, tiene que dirigir, con Su balanza perfecta, al Bien y al Mal, según lo considere oportuno. Nosotros somos polvo, no podemos entrometernos en el plan misterioso de un Sistema Solar, Cósmico: ¡sin embargo nadie nos impide que pidamos cuentas de ello!

Lo más grande que he conquistado en esta sociedad, en este Planeta, es la Libertad que los Hermanos del Cielo, en cambio, viven espontáneamente en todo el Universo. ¡Es por ello que he sido asesinado varias veces, hasta he sido quemado vivo! Pero no por la fe. ¡Es algo que siempre me ha importado mucho, cuando vine desde mi mundo al Planeta Tierra, era el poder traer conmigo la Verdad de Cristo, pero sobre todo la Libertad! ¡Quiero obedecer a Dios (severamente) pero también quiero discutir con Él y entender! Es lo que siempre he intentado enseñarle a quienes me siguen. Se me conoce como alguien muy rígido, pero acepto la discusión, ya no hay más hogueras.

P: ¿Durante el Apocalípsis las personas pueden luchar para defender su vida física? ¿Si álguien me apuntara una pistola podría defenderme y escapar?

Giorgio: ¡Claro que si, es el principio de la legítima defensa! Uno no tiene que dar su vida por nada. La vida es sagrada y si álguien me apuntara una pistola yo reaccionaría para defenderla con los dientes, inclusive hasta el punto de hacerle daño. De veras os digo que no estoy defendiendo mi vida sino la Idea y la Causa que llevo a cabo y que encarno, porque es necesario que divulgue. ¡Si en cambio defendieras tu vida solo para preservarla te estarías equivocando! Cristo no se dejó matar para nada. Cuando estaba siendo azotado no se quedaba callado, pero a Sus torturadores les preguntaba por qué lo estaban azotando. ¡Entonces hay que defenderse y decir la Verdad!

P: ¿Las personas serán conscientes de que están comiendo carne?

Giorgio: No solo lo sabrán, sino que será publicitado. Quizás en algunos Países ya esté ocurriendo, creo y espero que en Italia jamás ocurra. En los periódicos se leerá que la policía ha arrestado a quienes la estaban cocinando.

P: ¿Cómo se explica el “pon la otra mejilla” según todo lo dicho anteriormente?

Giorgio: No es necesario defenderse si uno lo único que quiere es defenderse a si mismo. Jesús no se defendió a Si mismo. ¡En cambio lo que tienes que cuidar es la Verdad y, a quienes te azotan, le tienes que dar la razón (en sentido metafórico)! A veces he tenido que recibir bofetadas de un hermano y, poniendo la otra mejilla, creo haber logrado encontrar la paz entre nosotros. ¡Si en cambio me insultas, juzgándome como una persona que no es creíble, que divulga un mensaje engañoso, o que la antimafia es falsa, reacciono porque estás ofendiendo a la Verdad!

P: Si Dios me pidiera que le diera a mi hijo no se si podría hacerlo. Cuando mi hijo estuvo a punto de morir le pedí al Padre que me llevara a mi y no a él.

Giorgio: Eres una madre, hiciste bien. Ni siquiera yo estaría preparado para darle a mi hija. Ahora os cuento una historia que le ocurrió a mi amigo Paco, que vive en Uruguay. Esta persona se ha convertido en un gran punto de referencia para todos nosotros y tenemos que seguir su ejemplo. Hace algunos años falleció su hijo de 12 años. En ese período él no era alguien muy cercano a la Obra, sin embargo se dirigió a Dios y le dijo: “-¡Te has llevado a mi hijo y ahora Te serviré! ¡Estaré cada vez más cerca de la Obra que lleva a cabo Giorgio ya que mi disponibilidad es total!” Esta es la prueba de que nosotros también podemos llegar a dar una disponibilidad como esa. ¡Me siento orgulloso y honrado de que lo haya hecho un hijo de nuestra Obra! Paco es un ser extraordinario un día me escribió una carta en la que decía: “-Querido Maestro, hoy es el aniversario de la muerte de mi niño. Estoy cada vez más convencido de que mi disponibilidad para Cristo es total” y entonces le respondí: “-Paco, tu eres mi maestro, no yo”.

P: Entiendo que hay una infinidad de cosas en la mente de Dios que para nosotros son inalcanzables, incomprensibles, pero también entiendo que Dios me permite entender esa parte de su Proyecto que me hace falta, a través de la Naturaleza, conceptos como la reencarnación, incluso por medio de los errores. Yogananda cuenta que un día tenía a un niño en brazos. Cuando el Cielo le comunicó que ese niño en su vida anterior había sido un feroz criminal, casi se le cayó de los brazos. Sin embargo esa criatura había nacido para tener otra posibilidad.

Giorgio: Si, estoy de acuerdo. La mayoría de las cosas que ocurren en este mundo responden a los flujos karmáticos y a todo hay que vivirlo con alegría. El karma es implacable, irreversible y lo que uno siembra luego lo recoge, a menos que intervenga el amor Crístico que puede hasta incluso desviar la dirección.

P: Si no me equivoco hace mucho tiempo que en los países asiáticos se come carne humana...

Giorgio: La novedad es que la carne humana se comerá en el mundo cristiano: ¡esa es una victoria teológica de Satanás! ¡Cuando Jesús habla de la abominación de los lugares santos se refiere a los pecados anticrísticos que cometen quienes profesan la fe cristiana, algo que ya está ocurriendo! ¡Los pedófilos más bastardos y los mayores perseguidores de la humanidad son cristianos! ¡Quiere decir que Cristo para poder detener al anti-cristianismo tendrá que destruir al mundo! ¡Vendrá Shiva, el Dios de la destrucción, y lo destruirá!

Os saludo y os abrazo, tenéis mucho sobre lo cual reflexionar. ¡Fuerza, sed felices y permaneced unidos!

El Señor de los Ejércitos lo anunció, pero no parece que estemos muy convencidos... Reveló además lo que ocurriría, pero al vernos no parecería que estemos seguros de querer hacerlo. ¡Estamos en guerra! Dejemos de quejarnos sobre cómo será todo, sobre cómo tendrían que comportarse los demás, y sobre cómo tendría que funcionar el mundo. ¡Estamos en guerra! Lo vemos con nuestros propios ojos, lo hemos escuchado con nuestros oídos, en todos lados se respira el penetrante olor de la muerte y muy pronto lo viviremos en carne propia. ¡Dejemos de ser canas al aire, ya no queda tiempo para dejarnos distraer! ¡No nos dispersemos en pensamientos como “si tan solo hubiera”, “si tan solo pudiera”, en esa constante intención de delegar expectativas y anhelos en un tiempo, en una ocasión adecuada, no nos dispersemos en la confusión ni en la indecisión! ¿Cuántos pretextos seguiremos anteponiendo para no tomar las riendas de nuestras vidas, siempre con la mirada puesta en una salida alternativa, siempre listos para quejarnos del peso de nuestra cruz? Estamos en guerra y ya no nos está permitido permanecer en el umbral escuchando, esperando que álguien nos arrastre y nos convenza de que tenemos que actuar seriamente. En esta guerra se combate tiempo completo y, donde sea que nos encontremos, tenemos que estar realmente. ¡Donde sea que estemos tenemos que creer realmente! Si insistimos en que somos cristianos pero no tanto, en que confiamos en el Señor pero no tanto, que somos disponibles y que estamos ansiosos por ensuciarnos las manos, pero no tanto... si aún no estamos convencidos, si después de todo este tiempo no somos conscientes lo mejor que podríamos hacer sería convertirnos a otro Credo y hacerlo ahora: cualquiera sea el Credo, porque seguir a Cristo no es un juego, ni un pasatiempo. Su soldado responde a cualquier tipo de solicitud, no se cansa nunca, ni se queja. Será torturado, burlado, perseguido, hasta incluso asesinado, pero no deseará otro lugar, ningún otro lugar del Universo, que no sea estar luchando a Su lado, día y noche, hoy y siempre, eternamente.

la rosa e la croce1a

Con amor y devoción

Sandra De Marco
26 de Julio de 2017
San Giovanni di Polcenigo