Esta página web utiliza cookies de carácter técnico propios y de terceros, para mejorar la navegación de los usuarios y para recoger información sobre el uso de la misma. Para conocer los detalles o para desactivar las cookies, puedes consultar nuestra cookie policy. Cerrando este banner, deslizando esta página o haciendo clic sobre cualquier link de la página, estarás aceptando el uso de las cookies.

elisabettaLA LIBERTAD INDIVIDUAL ES EL FRUTO DEL COMPROMISO COLECTIVO
Son las 17 horas del día 6 de enero de 2010, día de la Epifanía del griego “manifestación – presencia divina” y me encuentro en el Palatriccoli (la Cancha de Básquet) de Jesi, con Lorenzo, Marco, Vanesa, Georgina, Stefania y Fabio, para escuchar una vez más a un apóstol de Cristo sobre la Tierra: Don Ciotti.
La municipalidad de Jesi, junto a la “Consulta por la Paz” y a la delegación de “Libera” (Asociación presidida por Don Ciotti) de Jesi, nacida el 18 de abril de 2009, organizaron el evento para entregar el reconocimiento de ciudadano honorario a éste extraordinario sacerdote, periodista, protagonista de la lucha contra la tóxico dependencia y contra la mafia, símbolo para muchas asociaciones de voluntariado que promueven los valores del respeto de la persona marginada, del diferente, de la legalidad y del ambiente.
Me conmueve la mirada límpida del grupo de chicos ex alumnos del Liceo Científico de Jesi, mientras presentan su libro recientemente publicado: “El espejo del juez”. Siendo madre me conmuevo al ver las caras de tantos jóvenes que se han incorporado a “Libera” de Jesi, las de los chicos de “Libera” de Ascoli Piceno, que también están presentes en el evento, colmados por ese coraje y esa esperanza que éste hombre de Dios infunde sobre ellos. Son sus frutos, chicos que han comprendido que la información es la base de la lucha contra la mafia, porque un país consciente es un país más civil; chicos orgullosos de sus batallas por la legalidad y los derechos humanos; listos para hacer su pequeña parte en la sociedad.
Don Luigi Ciotti, una manifestación de energía sobrehumana que mueve montañas (la organización LIBERA tiene una coordinación de más de 1500 asociaciones y está presente en más de 30 naciones europeas), toma la palabra y con gran humildad acepta la ciudadanía pero no como otorgamiento personal, sino en representación de mucha gente que desde hace 45 años ha fundado junto a él el grupo “Abele”.
Acepta la ciudadanía en nombre de ese NOSOTROS que nos une a todos en el hambre y en la sed de justicia, porque es el  NOSOTROS el que vence en la lucha entre el Bien y el Mal, no el YO.
En ese momento no puedo hacer menos que pensar en nuestro querido Giorgio, en los 20 años de estigmas en los cuales su compromiso más grande ha sido despojarnos de nuestro YO, para vestirnos del NOSOTROS, que hoy se expresa a través de las actividades de nuestras asociaciones Antimafiaduemila, Funima International y Giordano Bruno.
“Expresar la solidaridad no basta” grita Don Ciotti “es la corresponsabilidad la que realiza el cambio y la respuesta de los ciudadanos debe ser fuerte” y citando a Norberto Bobbio: “La democracia vive de buenas leyes y de buenas costumbres"… ¡y las buenas costumbres somos nosotros, con nuestro compromiso, nuestras elecciones, nuestro coraje que no puede ser delegado a algún otro!
Palabras que marcan a fuego el espíritu de los presentes. “El problema de nuestro país no son las Mafias, sino la corrupción, la concusión, las varias formas de ilegalidad, la continua mediación que hace maleables las leyes según la propia conveniencia… tenemos que reflexionar sobre todas las formas de ilegalidad… ¡Porque los delitos contra el ambiente todavía no han entrado en el código penal, a pesar de los continuos reclamos! La legalidad es el instrumento junto a la solidaridad para alcanzar la Justicia”. Don Ciotti cita el documento de los Obispos de 1991 “educar a la legalidad”, subrayando que los documentos tienen que hacerse carne y vida cotidiana. “Estamos llamados a dar testimonio cristiano y a la responsabilidad civil… es necesario despojarse de esa cultura que exalta el individualismo en detrimento de la colectividad, de una cultura degradada, que se rebaja ante los intereses de una parte… el cristianismo no se puede contentar con el enunciar un ideal, debe entrar en la historia, tenemos que ensuciarnos las manos… ¡porque la primera gran enfermedad mortal es el delegar, la indiferencia, la resignación!
Tenemos que encontrar la fuerza dentro de nosotros para ser constructores de paz, dejar de desperdiciar la vida solo por el propio YO, por el propio bienestar y aprovechar el YO por la VIDA, por un mundo mejor. Un cristiano no puede obedecer a la injusticia y volverse cómplice…
La libertad individual es solo el fruto del compromiso colectivo y éstos chicos lo han demostrado con su trabajo.  No hay Paz sin Justicia, no hay Justicia sin la búsqueda de la Verdad”.

Ninguno en el regreso a casa de ésta noche podrá evitar hacerse un examen de conciencia.
Los tiempos se han acortado, Cristo sacude los riñones y los corazones a través de Sus siervos sobre la Tierra y en ese día tan esperado nadie en Su presencia podrá justificarse diciendo: “yo no sabía”.

Fraternamente
Elisabetta Montevidoni
Secretaría del Cielo a la Tierra
Sant’Elpidio a Mare, 6 de enero de 2010