TEN CERCA LO QUE ES BUENO…Ten cerca lo que es bueno, aunque sea un puñado de tierra.
Ten cerca aquello en lo que crees, aunque sea un árbol solitario.
Ten cerca lo que debes de hacer, aunque esté muy lejos de aquí.
Ten cerca la vida, aunque sea más fácil abandonarse.
Ten cerca mi mano, aún cuando me haya alejado de ti.
Anónimo Navajo
6 DE FEBRERO 2010
“ACTOS DE FE”
Desde hace poco tiempo muchas almas insistían en encontrarse con Giorgio. En particular se encomendaban a nuestra querida Elisabetta, que con diligencia y amor, durante varios meses, no ha desatendido ninguna de sus peticiones que llegaban por mail. Junto a Maria José y a Vanesa, el equipo de la redacción espiritual de Giorgio trabaja constantemente y sabe como llevar adelante su cometido incluso en ausencia de Giorgio, cada vez más ocupado, dedicado a planificar lo que será –y es- la parte final de su misión.
Giorgio está cada vez más cansado y el cansancio es visible cuando llega al encuentro espiritual tan esperado, organizado por razones de espacio en dos locales de nuestra estructura… nos adaptamos.
Se acaba de recuperar de una enésima y profusa sangración. Le esperamos todos los que formamos parte del Arca de Sant’Elpidio, incluidos niños y jóvenes, y más de 30 personas que habían venido de Roma, de Perugia, de San Benedetto, de Osimo, de Polignano (provincia de Bari), de Narni, una pequeña ciudad de 29.000 habitantes de la región Umbria, en el centro de Italia, que no tiene salida al mar, tierra de místicos y de santos como Santa Clara, Santa Rita de Cascia... una tierra tan amada y visitada por Francisco de Asís.
Elisabetta y Pier Giorgio Caria, sin perder tiempo, entretienen los invitados.
Giorgio se sienta y pide perdón por el retraso… nos mira a todos a los ojos y se pone a disposición.
Nos sentimos como en casa, en familia, las palabras de Giorgio y su profunda vibración inhiben las resistencias, disipan las resistencias, disipan los temores... se habla con el corazón abierto.
Habla al corazón de Pina de Narni la cual nos cuenta a todos su historia de vida, nos habla de su Fe en la Virgen que la ha salvado, apoyado, protegido hasta cuando hace nueve años recibió el don de la “sanación”, con la energía de las manos. Sanación del cuerpo, pero sobretodo del espíritu a partir de los miembros de su familia, de mucha gente, de algunos médicos, profesionales que no veían la hora de conocer a Giorgio. La joven hija de Nina resalta entre todos ellos, una ángel rubio de alma noble cuyos valores interiores chocan con esta humanidad ciega y sorda.
Se anima a tomar la palabra Roberto, un profesional también de Narni que nos cuenta como ha vuelto a encontrar la Fe que renueva junto a un grupo de oración, pero sobretodo a través de la acción concreta, en su vida cotidiana, a favor de sus clientes, con quienes instaura una relación bajo la óptica espiritual de Servicio y de Amor hacia el prójimo.
Giorgio se pone de pie emocionado y les abraza a todos. Todos nosotros vemos sus manos con los Signos sagrados de los Estigmas todavía sangrantes...
La emoción es tan intensa que veo descender muchas lágrimas entre el público, además de las mías.
Y pienso: “Gracias Señor... ¡Que nunca nos acostumbremos a ver este Signo Tuyo que ha dado la vuelta al mundo, un Signo capaz de revolucionar la vida de un ser humano siempre que se le “reconozca” como Signo de la Pasión de Cristo... como parte de Su Divina Manifestación!
Se le invita a hablar a Francesco de Perugia, un joven de 22 años que ha sobrevivido a un accidente mortal cuando tenía 16 años. Nos cuenta un sueño que había tenido hacía mucho tiempo. Francesco se encontraba en una habitación y veía que bajaba del techo una luz que asumía la forma de una figura que él conocía: Jesús Cristo. El, como espectador en silencio, ve al Maestro que habla a un hombre presente con él en la misma habitación. No conoce a ese hombre y no recuerda las palabras de ese diálogo. Después de mucho tiempo su madre Paola le muestra una foto y le habla de Giorgio Bongiovanni.
¡Era él ese hombre que hablaba con Jesús en la habitación!
¿Una llamada? ¿La indicación de un camino que seguir? ¿Una elección que tomar?... Los caminos del Señor son infinitos y misteriosos. Ahora depende de Francesco realizar y sentir lo que tiene que hacer. Giorgio, con infinito amor le dice que la puerta está siempre abierta y que hay muchos jóvenes en Sant’Elpidio con quienes pudiera verse cuando lo desee.
Con la misma pasión contesta a muchas preguntas del grupo de Roma. Les anima a seguir adelante, a encontrarse para conocerse mejor y prepararse juntos para las próximas actividades de divulgación... ¡qué bonita el Arca de Roma!
El encuentro prosigue y toma la palabra Savino de Polignano, consciente del alcance espiritual de Giorgio, a quien le habla con el corazón en la mano de lo que siente... de los deseos profundos suyos y de su mujer. Cuando sucede esto Giorgio revela sin medios términos intimidades espirituales, porque sabe bien que para los interesados será como un tesoro.
Nos dice Giorgio: “Cuando Jesús fue crucificado, dijo “Perdónalos Padre porque no saben lo que hacen. Significa que los pueblos latinos, recibiendo el Perdón, son llamados de nuevo por Cristo”.
Esto y más todavía hemos vivido con Giorgio el 6 de febrero. En el anno domini 2010,…mientras esperamos la venida del Hijo de Dios Jesús Cristo.
Con Devoción
Mara Testasecca
6 de febrero 2010
Ten cerca aquello en lo que crees, aunque sea un árbol solitario.
Ten cerca lo que debes de hacer, aunque esté muy lejos de aquí.
Ten cerca la vida, aunque sea más fácil abandonarse.
Ten cerca mi mano, aún cuando me haya alejado de ti.
Anónimo Navajo
6 DE FEBRERO 2010
“ACTOS DE FE”
Desde hace poco tiempo muchas almas insistían en encontrarse con Giorgio. En particular se encomendaban a nuestra querida Elisabetta, que con diligencia y amor, durante varios meses, no ha desatendido ninguna de sus peticiones que llegaban por mail. Junto a Maria José y a Vanesa, el equipo de la redacción espiritual de Giorgio trabaja constantemente y sabe como llevar adelante su cometido incluso en ausencia de Giorgio, cada vez más ocupado, dedicado a planificar lo que será –y es- la parte final de su misión.
Giorgio está cada vez más cansado y el cansancio es visible cuando llega al encuentro espiritual tan esperado, organizado por razones de espacio en dos locales de nuestra estructura… nos adaptamos.
Se acaba de recuperar de una enésima y profusa sangración. Le esperamos todos los que formamos parte del Arca de Sant’Elpidio, incluidos niños y jóvenes, y más de 30 personas que habían venido de Roma, de Perugia, de San Benedetto, de Osimo, de Polignano (provincia de Bari), de Narni, una pequeña ciudad de 29.000 habitantes de la región Umbria, en el centro de Italia, que no tiene salida al mar, tierra de místicos y de santos como Santa Clara, Santa Rita de Cascia... una tierra tan amada y visitada por Francisco de Asís.
Elisabetta y Pier Giorgio Caria, sin perder tiempo, entretienen los invitados.
Giorgio se sienta y pide perdón por el retraso… nos mira a todos a los ojos y se pone a disposición.
Nos sentimos como en casa, en familia, las palabras de Giorgio y su profunda vibración inhiben las resistencias, disipan las resistencias, disipan los temores... se habla con el corazón abierto.
Habla al corazón de Pina de Narni la cual nos cuenta a todos su historia de vida, nos habla de su Fe en la Virgen que la ha salvado, apoyado, protegido hasta cuando hace nueve años recibió el don de la “sanación”, con la energía de las manos. Sanación del cuerpo, pero sobretodo del espíritu a partir de los miembros de su familia, de mucha gente, de algunos médicos, profesionales que no veían la hora de conocer a Giorgio. La joven hija de Nina resalta entre todos ellos, una ángel rubio de alma noble cuyos valores interiores chocan con esta humanidad ciega y sorda.
Se anima a tomar la palabra Roberto, un profesional también de Narni que nos cuenta como ha vuelto a encontrar la Fe que renueva junto a un grupo de oración, pero sobretodo a través de la acción concreta, en su vida cotidiana, a favor de sus clientes, con quienes instaura una relación bajo la óptica espiritual de Servicio y de Amor hacia el prójimo.
Giorgio se pone de pie emocionado y les abraza a todos. Todos nosotros vemos sus manos con los Signos sagrados de los Estigmas todavía sangrantes...
La emoción es tan intensa que veo descender muchas lágrimas entre el público, además de las mías.
Y pienso: “Gracias Señor... ¡Que nunca nos acostumbremos a ver este Signo Tuyo que ha dado la vuelta al mundo, un Signo capaz de revolucionar la vida de un ser humano siempre que se le “reconozca” como Signo de la Pasión de Cristo... como parte de Su Divina Manifestación!
Se le invita a hablar a Francesco de Perugia, un joven de 22 años que ha sobrevivido a un accidente mortal cuando tenía 16 años. Nos cuenta un sueño que había tenido hacía mucho tiempo. Francesco se encontraba en una habitación y veía que bajaba del techo una luz que asumía la forma de una figura que él conocía: Jesús Cristo. El, como espectador en silencio, ve al Maestro que habla a un hombre presente con él en la misma habitación. No conoce a ese hombre y no recuerda las palabras de ese diálogo. Después de mucho tiempo su madre Paola le muestra una foto y le habla de Giorgio Bongiovanni.
¡Era él ese hombre que hablaba con Jesús en la habitación!
¿Una llamada? ¿La indicación de un camino que seguir? ¿Una elección que tomar?... Los caminos del Señor son infinitos y misteriosos. Ahora depende de Francesco realizar y sentir lo que tiene que hacer. Giorgio, con infinito amor le dice que la puerta está siempre abierta y que hay muchos jóvenes en Sant’Elpidio con quienes pudiera verse cuando lo desee.
Con la misma pasión contesta a muchas preguntas del grupo de Roma. Les anima a seguir adelante, a encontrarse para conocerse mejor y prepararse juntos para las próximas actividades de divulgación... ¡qué bonita el Arca de Roma!
El encuentro prosigue y toma la palabra Savino de Polignano, consciente del alcance espiritual de Giorgio, a quien le habla con el corazón en la mano de lo que siente... de los deseos profundos suyos y de su mujer. Cuando sucede esto Giorgio revela sin medios términos intimidades espirituales, porque sabe bien que para los interesados será como un tesoro.
Nos dice Giorgio: “Cuando Jesús fue crucificado, dijo “Perdónalos Padre porque no saben lo que hacen. Significa que los pueblos latinos, recibiendo el Perdón, son llamados de nuevo por Cristo”.
Esto y más todavía hemos vivido con Giorgio el 6 de febrero. En el anno domini 2010,…mientras esperamos la venida del Hijo de Dios Jesús Cristo.
Con Devoción
Mara Testasecca
6 de febrero 2010