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MarcoeFrancescaPor Francesca y Marco
Contra todos los pronósticos meteorológicos, el Padre Sol ofreció Su calor y Su Luz en un domingo de febrero del Anno Domini 2013. Muchas emociones se sucedieron ese día y atravesaron nuestras almas. Los Ángeles del Padre Glorioso prepararon nuestros espíritus para recibir al Espíritu de Aquel que Grita en el Desierto árido de esta humanidad degenerada, la Voz que Grita entre multitudes de hombres incrédulos, que no están preparados para el Acontecimiento que el Cielo ha predispuesto: la Parusía anunciada por las Señales de los Tiempos que sacuden los riñones y los corazones de los habitantes de la Tierra.
En la ciudad en la que Dante escribió parte de la Divina Comedia, Gubbio, la ciudad en la que San Francesco de Asís, el Juglar de Dios, se hizo Instrumento del Altísimo para amansar al Lobo que aterrorizaba a los habitantes; llegó un Hombre Señalado y Ungido por la Consciencia Crística, cuya voz empuja hacia un verdadero Despertar de todos aquellos que entienden el Mensaje. En un coro de mirlos y petirrojos de inesperados cantos casi primaverales, en un remolino de tenues colores relucientes gracias a la nieve reciente, en una naturaleza rejuvenecida, la Iglesia Celeste parecía traslucir en la ciudad que tanto había esperado el cumplimiento de esta Visita, que tanto esperaba la alegría de esta Reunión, como si se concretara una soñada Pintura Cósmica. Las nubes se alejaban y, con su ilimitada Luz vivificante, el Sol desgarraba los velos del alma de esta tierra y daba espacio a Aquel que anuncia la Verdad del Verbo que pronto se mostrará como Juez Justo.
La llegada de Giorgio Bongiovanni a Gubbio, acompañado por los demás Hermanos, nos llevó a imaginar aquello que ocurría hace dos mil años, cuando en Jerusalén una multitud de personas, síntesis espiritual de la humana naturaleza Planetaria, esperaba que el Hijo del hombre entrara en la ciudad.
No sabemos explicar todas las sensaciones que vivimos en esos momentos en los que, a pesar de estar ocupados en las cosas que teníamos que organizar, después de habernos abrazado con todos nuestros queridos huéspedes, los corazones seguían palpitando de amor por Aquel a quien queremos servir. Y así, después de haber compartido el almuerzo en Comunión, dentro nuestro comenzó la espera de la conferencia que ya desde hacía semanas estábamos preparando, cada uno con tareas diferentes, todos con el mismo objetivo: Marco, Francesca, Gabriele, Claudia, Susi y Silvia. Percibíamos las emociones, el apoyo y el mejor de los deseos por parte de los Hermanos con los que compartimos cada día el Camino hacia la Verdad Cósmica.
Al comenzar la conferencia la tensión emotiva que nos acompañaba fue menguando poco a poco, dejando espacio a la sensación de estar en el lugar indicado: estábamos haciendo exactamente lo que queremos hacer en esta vida.
El evento comenzó con la participación de Flavio Ciucani, Historiador y Escritor, que logró fascinar a todos gracias a su capacidad de localizar y conectar entre si las Señales Divinas que se manifiestan en las diferentes culturas del mundo. El público quedó muy impresionado por las lagrimaciones de los íconos sagrados y por las demás expresiones de Sufrimiento Celeste causado por la humana degeneración; aún más intensas fueron las reacciones ante la visión de estatuas y pinturas que lloran Mirra, Aceite para la Unción del Rey, y de las inequívocas Señales que en todas las Religiones Anuncian la próxima Visitación de todos los “Avatares”.
Después de esta introducción llegó el turno de Pier Giorgio Caria, Investigador y Documentalista, que hipnotizó a todos con su exposición. Sin lugar a desmentidas y con pruebas irrefutables, los presentes tuvieron la posibilidad de comprender que la Realidad de la Presencia Extraterrestre sobre la Tierra tiene que ser considerada como un verdadero Acontecimiento Mesiánico, estrechamente relacionado con la Segunda Venida de Cristo, y que se encuadra en el contexto de la crisis global que, en un aumento desconcertante, desde hace algunas décadas está postrando al Planeta y a la Humanidad; de hecho, las primeras manifestaciones públicas de la Presencia Extraterrestre en la época contemporánea coinciden con los primeros experimentos bélico nucleares, ya que la escisión del átomo es una de las más graves afrentas a la Vida. Por lo tanto estas Visitas Extraterrestres tienen que ser consideradas al estilo de una Severa Amonestación por parte de las Milicias Celestes del Señor de los Ejércitos, una Verdad que ha sido confirmada por todos los verdaderos Contactados.
Luego del video que muestra los análisis médicos realizados a Sus Sagrados Estigmas, Giorgio Bongiovanni entró a la sala y comenzó a hablar. Tomó el micrófono y empezó inmediatamente compartiendo con los presentes lo que es su Felicidad Interior por los dones que ha recibido en esta vida. A pesar del sufrimiento de las Sagradas Señales que lleva en su cuerpo desde hace más de veinte años y a pesar del fardo que lleva consigo alguien que ha comprendido plenamente el estado hipercaótico en que se encuentra la humanidad, Giorgio es un hombre feliz. Y no hay distonía entre la Gracia recibida de lo Alto y el Fuerte Grito que parte del Plexo Solar de quien Conoce la Justicia de Cristo. La felicidad y la alegría del Servicio a la Verdad están en acuerdo con la Ira Santa de alguien que ve a sus hermanos sufrir en el mundo, pueblos enteros martirizados por las guerras, los niños masacrados por este silencioso holocausto, lento e inexorable que se llama hambre.
“Me enojo muchísimo porque mientras estoy hablando con vosotros, ahora, en este momento, han muerto unos niños, muchos niños... ¡treinta mil niños por día mueren de hambre! ¿Acaso vosotros no os enojaríais?”
“¿Cómo podemos vivir serenos sabiendo que en este Planeta los débiles son aplastados por los poderosos, prevalece la lógica del atropello, todo en perjuicio de la colectividad y de las futuras generaciones de la Tierra? ¿Cómo se puede pretender estar serenos en este mundo en el que la riqueza de todos está en manos de pocos, mientras nuestras barrigas se llenan de la comida superflua que por derecho de necesidad le correspondería a cada ser humano de esta maravillosa Tierra, esta Madre Generosa que constantemente ofrece recursos y dones preciosos a sus hijos ingratos, enloquecidos?”
El Mensaje que Giorgio ha venido a anunciar a Gubbio es el inminente regreso de Aquel que, a través del Acto extremo de la Cruz, cargó sobre sus espaldas todo el Karma humano. Y “cuando regrese el Dueño de la Viña” comprobará el actual drama humano, que supera ampliamente el antiguo de Sodoma y Gomorra; volverá para restablecer la Justicia en esta dimensión densa y carente de Amor y de Dignidad. ¡Esto nos tiene que hacer felices! Si bien somos indignos y pequeños ante un Plan Cósmico que brilla y danza en la Perfección de un Punto de Amor Infinito, tenemos que seguir pidiendo Justicia para nuestro prójimo y la esperanza que nos empuja a luchar cada día, tiene que corresponder además a la toma de consciencia de la situación crítica en la que vivimos.
“Tenemos que tener Temor de Dios: ¡no tenemos que desafiar al Padre Adonay, al mismo Dios que envió a Cristo, al mismo Dios que creó el diluvio universal, al mismo Dios que mató a los habitantes de Sodoma y Gomorra! ¡Es el Dios que manda a Su Hijo porque nos ama y es el amor más grande de todos los amores, pero que ha destruido y matado… por Amor! ¡También hoy podría repetir lo que hizo anteriormente! ¡Hoy que la humanidad ha superado la perversión de Sodoma y Gomorra! ¡Si nosotros lo desafiamos, Su Ira se desencadenará contra nosotros! ¿Hay algo que Dios no pueda hacer? ¡Nada! Puede hacer todo, sin excepciones. Si nosotros no nos preparamos interiormente al amor, a la Hermandad, a la Tolerancia, a la Justicia, a la Solidaridad, si no desarrollamos los Valores de la Hermandad Universal, Él hará nuevamente una Selección”.
El Mensaje del cual Giorgio es portador es revolucionario y nos exhorta a mirar lo que nos rodea, evitando cerrar los ojos, porque hacernos los ciegos y sordos no nos llevará muy lejos. La Voz de este Ser especial que lleva las Señales de la Pasión de Cristo en su cuerpo nos empuja, hoy como ayer, a Comprender la Verdad de Cristo que se concreta en una acción gratuita de ayuda y Amor hacia el prójimo, para poner en práctica completamente esa Hermandad de la cual nos habla el Evangelio. No se puede delegar a otros lo que nos corresponde como Deber a cada ser humano que realmente quiere ser digno de su Humanidad: Deber no tanto con respecto a un “ideal”, sino más bien a una Ley de Ciencia Espiritual que supera todo Credo y que se puede sintetizar en tres palabras de un profundo Significado: Justicia, Paz, Amor. Si el hombre de esta Tierra quiere cambiar algo, sólo puede hacerlo luchando contra los males de este mundo y denunciando, si es necesario, incluso dando la cara y la propia vida, reclamando y pretendiendo Justicia sobre este Planeta, por este Planeta y por si mismo.
Como siempre Giorgio ofreció gran cantidad de claves para las preguntas por parte del público el cual, conquistado, lo escuchó atentamente expresando sus numerosas inquietudes.
Después de la conferencia, que contó con la participación de más de doscientas personas en la sala, entre las cuales estaban presentes muchos jóvenes y aproximadamente ciento setenta conectadas por livestreaming; las cuerdas de nuestras almas se soltaron. Eran muchas las imágenes que volvían a nuestras mentes, la gran cantidad de personas que hemos encontrado a lo largo de estos últimos cuatro años, desde que Pier Giorgio Caria, a quien conocimos en Asís, nos habló de Giorgio. Hablamos con mucha gente, compartimos el Mensaje del Cielo, y a veces incluso discutimos; llevados por ese Furor que nos inunda por el inmenso descubrimiento que nos da ganas hasta de gritar al mundo con tal de que todo Hombre se alegre a causa de la Fuerza Liberadora que solo la Verdad puede brindar.
Por fin Giorgio llegó aquí a Gubbio y habló a los corazones de quienes querían Escucharlo. Y esperamos que sean muchas otras las ocasiones en las que él pueda estar aquí entre nosotros, acompañado por los Hermanos del alma que conocemos desde hace mucho tiempo. ¡El domingo para nosotros fue como un Sueño inolvidable, una atmósfera irreal, más bien, tan perfectamente Real que parece increíble!… ¡Giorgio aquí en Gubbio! La conferencia que estaba a punto de comenzar, el Milagro de los Estigmas que se verificó una vez más… y, afuera de esta esfera, en el fondo, la vida que transcurría, los niños en las carrozas de carnaval, hombres que atravesaban las calles ciudadanas distraídos y ensimismados en sus problemas cotidianos, el Sol que calentaba las piedras de las paredes antiguas de la ciudad, la Naturaleza que parecía vivificarse completamente, con sus exuberantes colores y su continua regeneración. Lo que sentimos que tenemos que decir es gracias, gracias por esta inmensa Fortuna, que nos hace sentir Hombres realmente, Seres con un Espíritu que pulsa y que intenta evolucionar: Hombres Nuevos. 
Después de la cena, Giorgio y todos los demás emprendieron el viaje de regreso. Nosotros, los del arca de Gubbio nos quedamos juntos. Nos mirábamos atónitos, una gran Luz nos rodeaba. La nostalgia de los Mundos de los que Giorgio nos habla nos hace sentir vivos. Los días pasan, el tiempo se acelera continuamente, caminamos entre las calles de un mundo de zozobras, pero en el cual por callejuelas estrechas y desconocidas la Luz estalla y resucita nuestros Seres. Esperamos que la Dimensión Cósmica que nos ha dejado este día nos acompañe siempre y que nos de mucha Fuerza y Fervor para seguir los caminos que el tiempo ha señalado.
Las Alas de la Águila nos envuelven en el Resplandor de los Tiempos Antiguos que se reconstruyen espiritualmente en un Eterno Presente que encierra el infinito. Esta Llama, que pulsa en los corazones de quienes han sabido reconocer la Fuerza y la Veracidad revolucionaria del Mensaje del cual Giorgio es portador y Anunciador, me hace acordar a otro Hombre que rompía con todos los esquemas y que invitaba a la Humanidad a replantearse todo. Este febrero representa una fecha muy significativa para nosotros, la matanza cósmica de un Mensajero que vino desde lo alto para revolucionar el flujo de la Vida, para poner en práctica la Transformación Alquímica del hombre, para hacer que éste se convierta en el “Homo Novus”. Filippo Giordano Bruno, nacido en Nola el 17 de febrero de hace alrededor de quinientos años, fue quemado vivo, asesinado vilmente por los mismos hombres a los que vino a iluminar, ante la mirada de los chicos que lo seguían y que estudiaban su Mensaje. El ruido de su cuerpo quemándose, a pesar de que su Espíritu ya se había proyectado al infinito del cual provenía, el crujido de la leña y el fuego que comía sus miembros, frente al estupor irreal de una muchedumbre que en su inconsciente sentía el peso desmesurado de las repercusiones de esa muerte que quedarían impresas para siempre en su alma. Ante los delitos cósmicos cometidos por muertos que entierran la Luz de los Vivos, hoy esta Verdad llevada a la hoguera sigue hablándonos. Todavía se percibe su eco lejano que sacude los espíritus de este tiempo. Esto nos tiene que empujar siempre a luchar por la Justicia, Unidos en el Camino del Cristo Cósmico, que mira y siente nuestros corazones, por Su Presencia en nosotros, en todo. Solo unos pocos se dan cuenta de esta Música que proviene de la Verdad. Estos pocos, que se reúnen en las Catacumbas del Tercer Milenio, a veces burlados, a menudo incomprendidos por esta sociedad indigna incluso de hospedar toda nueva vida que nace sobre la Tierra, difunden un Mensaje Grande, tan Grande que el Fuego que quema en sus corazones a veces desborda. Aquellos que han elegido ponerse al Servicio de la Verdad Cósmica, unos pocos, vagan por las angostas calles de este mundo, en la oscuridad de las tinieblas que rodean al hombre, ofreciendo un rincón de Paraíso en la Tierra, y vivificando la Llama adormecida, para reavivar el Fuego y el Heroico Furor en las Nuevas Semillas que germinarán y se expresarán plenamente en las infinitas extensiones de praderas verde esmeralda de la Nueva Tierra, bajo el Nuevo Cielo, donde la noche es día y el día Esplendor.
Francesca y Marco
Gubbio, 17 de Febrero de 2013