Amar, amar y amar.
Amar a toda criatura viviente que respira y respirará, amar el cielo, amar el mar.
Amar a Dios por sobre todas las cosas, amar el amar. Amar al prójimo e ir más allá.
Amar, amar y amar.
Amar la Justicia, Amar la Verdad, amar nuestra guerra y amar La Paz. Amar el camino y amar el andar.
Amar tu luz y amar tu dar.
¿Qué es amar sin saber olvidar, que es amar si aún tenemos que perdonar?
Amar tu sonrisa que nos ayuda a elevar. Amar tus ojos que nos ven sin mirar.
Amar tu nostalgia, que nos permite intentar escuchar.
Amar, amar y amar.
Transitar tu camino donde nos dejas, Tu Señal.
Beber cada gota de sangre con la que riegas nuestro propio Holocausto una y mil veces, para luego perdernos en las garras de la noche e intentar olvidar y finalmente reencontrarnos cuando despunta el alba y volverte a recordar.
Amar, amar y amar.
Amar para volver a sembrar, amar para que un día, juntos, podamos cosechar.
Amar, amar y amar.
Un mantra eterno que en tus labios siempre vibrará.
Amar y odiar, amar y luchar, luchar y encontrar.
Estrecharte en nuestros brazos cuando el tiempo se acabe.
Escucharte durante la batalla muy cerca de mi alma, compartiendo las victorias y llorando las derrotas.
Amar, luchar y escuchar
el canto de las aves cuando te quieren buscar. Abrimos nuestras ventanas y glorificamos al Sol.
Allí estás manifestándote en el Amor. Mil hojas al viento y mil palabras de amor no podrán jamás honrarte en todo tu esplendor. La muerte nos busca, pero antes que ella nos quieres hallar, para que si alguna vez nos encuentra y nos quiere llevar partamos sabiendo lo que es el Amar.