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gabrieleyclaudia100Por Gabriele Monacelli e Claudia Marsili

¡Desde hace varios meses el Arca de Gubbio se estaba preparando para este importante evento, para lograr que los jóvenes tuvieran la oportunidad de hacer sentir su voz! Tuvimos reuniones con las asociaciones del territorio, contactamos a las organizaciones locales, realizamos afiches, nos encargamos de la logística, de la publicidad... ¡y finalmente llegó el gran día! Con gran entusiasmo y una buena dosis de ansiedad y cansancio recibimos a los chicos de “Our Voice”, quienes esa mañana presentarían su espectáculo denominado “L’Arte uccide la mafia” (El Arte mata a la mafia) en el marco del evento organizado por la Municipalidad de la ciudad de Gubbio bajo el título “Un chilometro di tela” (Un kilómetro de tela), al que habían sido invitadas a participar algunas escuelas de lugar.

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Las voces de los jóvenes inundaron la “Piazza Grande” con una fuerza impetuosa. Voces intensas, directas, emocionantes, conmovedoras, penetrantes… retumbaron en el ensordecedor silencio de las antiguas piedras de la ciudad. Algunas personas se asomaban a las ventanas, los ojos de los espectadores estaban húmedos, en nuestros pechos se sentía toda su arrolladora pasión.

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El frío penetrante no les impidió que dejaran aflorar su energía... ¡aunque luego, por la tarde casi todos sintieron los efectos de esta prolongada exposición al viento de la Plaza y del cansancio por haberse levantado a la madrugada! Algunos sin voz, otros con un poco de fiebre y todo tipo de dolores. Por consiguiente nos encargamos de curarlos como mejor pudimos... ¡y unas horas más tarde los chicos ya estaban listos y entusiastas para dar el máximo de sí mismos!

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A la noche el mismo espectáculo se repitió en el Bar “The Village Pub” en el cual la interpretación de los jóvenes se unió en forma magistral a la exhibición del grupo de Hip Hop “Oregon Tape Crew”. Un ciclón de fuerza y pasión nos arrolló. ¡Una gran mezcla de los talentos que todos han recibido para crear algo realmente poderoso! ¡Todos quedamos con la boca abierta al sentir la energía que liberaban y que se expandía en todas partes!

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Ojos luminosos y profundos, sonrisas sinceras, miradas que vibraban de esperanza, corazones puros que se despegan del barro que los envuelve, que salen del pantano de la sociedad que tendría que protegerlos y guiarlos y que en cambio los hunde cada vez más, pero ellos no aflojan, resisten, se aferran tenazmente para poder seguir vislumbrando esa pureza perdida que con la fuerza arrasadora de su pasión por la justicia y por la verdad que los atrae como el canto de una sirena y los golpea interiormente como el viento, como el sol que ilumina sus pasos y que guía a sus espiritus sedientos de amor. Amor por la Vida.

Chicos, sois especiales, con vuestro entusiasmo y vuestra sed de justicia lográis sacudir nuestros espíritus. Sois nuestra voz, nuestros ojos y nuestros oídos, porque a través de todos vosotros leemos la sociedad en la que vivimos, con la inocencia y la espontaneidad que generalmente nos falta a los adultos. ¡Vosotros, que tendríais que tener la libertad de vivir vuestra juventud... y que en cambio estáis aquí, luchando al lado nuestro! Es más... somos nosotros los que os seguimos... y que respiramos la alegría de estar juntos, de compartir algo realmente grande.

Todavía recordamos esa Navidad, de hace algunos años, en la que las pequeñas niñas, aún inmaduras, se presentaron ante nosotros con un pequeño espectáculo fruto de su pasión, de su determinación y de su compromiso para así poder expresarse... ¡para hacer sentir su voz! Los ojos de todos los presentes se llenaron de lágrimas. ¡¿Quién se habría imaginado que unos pocos años más tarde, mientras esas jovencitas iban creciendo y mientras se iban uniendo nuevas fuerzas al grupo, el espectáculo llegaría a las escuelas, a los teatros y a las plazas de toda Italia?!

Pero alguien, de todos nosotros, había entendido todo desde el principio... desde aquella noche... ese era nuestro amado Giorgio, quien con profunda emoción dijo: “¡A este espectáculo lo llevaremos a Palermo!” Giorgio, maestro y guía para todos nosotros, siempre estuvo al lado de estos chicos, para darles fuerza, energía, confianza. Él, que con su paso decidido deja un surco indeleble, que nos indica claramente hacia dónde ir... qué buscar... por qué cosa dejarnos inspirar.

Lo que vemos ante nuestros ojos es un grupo que intenta perfeccionarse con fuerza, día tras día, para ser cada vez más profesionales y para llevar aún más lejos su voz, que adquiere experiencia y que aprende de sus errores, que se fortaleza con los talentos de todos y que corrige sus debilidades con minuciosa paciencia. Que cuando cae... se levanta. Siempre. ¡Con una energía renovada!
Chicos, haber compartido con todos vosotros la adrenalina de los preparativos, vivir la atmósfera detrás de bambalinas, la concentración para seguir con el programa, paso a paso, y para asegurarse de que todo estuviera en su lugar... ¡para hacer que el mensaje se pudiera transmitir a todos los presentes, con toda su compleja sencillez! Nos sentimos agradecidos y llenos de la inmensidad que hemos recibido.
Gracias por vuestra pasión. Gracias a cada uno de vosotros.
Vuestras voces son nuestro futuro. El futuro de cada uno de nosotros.
Con amor... a vuestro servicio

Gabriele e Claudia
Gubbio, 29 de Abril 2017