Esta página web utiliza cookies de carácter técnico propios y de terceros, para mejorar la navegación de los usuarios y para recoger información sobre el uso de la misma. Para conocer los detalles o para desactivar las cookies, puedes consultar nuestra cookie policy. Cerrando este banner, deslizando esta página o haciendo clic sobre cualquier link de la página, estarás aceptando el uso de las cookies.

erika2018aPor Erika Pais

EL ARRIBO

Sudamérica, tierra exótica para el europeo sensible, misteriosa y mística. Que conversas dialectos secretos y directos con mundos secretos. Donde todo empieza y termina misteriosamente. Que albergas la luz pero la oscuridad dibuja en tus calles las pasiones más humanas, los opuestos más temibles, la Verdad tan buscada. Eres parte de la Galilea mesiánica protegida por la Historia, mancillada por el olvido, disimulada por el poder bajo nefastas formas de torturas y silencios. Llena de vida, de luchas, de energía, de historia vivida y sublime que deben ser sepultadas por la mano incuba de lo superfluo, ofuscada, asesinada, pero debe parecer siempre virgen, revoltosa, contradictoria y hasta sutilmente pura como para que el escenario apocalíptico no vierta la tensión que pudiera denunciarlo.

Abres tus puertas, una vez más, para que en tus calles, en tus ríos, en tu gente, en tu sangre una batalla sea librada, la primera batalla del fin, el principio más temido y más deseado. No es casualidad, nunca lo fue, la historia que nos delata, que nos construye, la esencia que nos nutre, el arquitecto que nos diseña y las Señales que nos acompañan.

Hermanos de Argentina, Chile, Paraguay, Uruguay, testigos presentes de una etapa, operadores de un momento, sobrevivientes de una prueba impuesta por la Obra, por el Cielo, por las circunstancias, por el amor, por la Justicia. Convocados, una vez más, por Aquel que nos guía y que no por casualidad dos veces fue marcado por las llagas sangrantes este lado del Jordán.

No por casualidad un tiempo de los tiempos fue escrito eternamente en los anales de la historia de esta Obra inmensa con el aroma y el sabor del Río de la Plata.

No por casualidad una vez más el avión procedente de Italia carretea en las pistas bonaerenses portando dentro de sí a varias almas ansiosas de encontrarnos.

Giorgio, Sonia Tabita, Sonia Alea, Davide Bonfigli, la servicial Elena y la querida Beatrice traspasan la puerta de embarque del aeropuerto de Ezeiza y echan a correr el reloj del tiempo, del fin de los tiempos, del principio de una etapa, nueva, definitiva, revolucionaria.

Nunca es “normal” la llegada de Giorgio y de quienes lo acompañan.

Nunca es “normal” todo lo que lo rodea, porque mientras la gente del mundo, los místicos del mundo, los periodistas del mundo, los amigos del mundo cuando visitan un país amigo se distienden y descansan para poder empezar las tareas o los encuentros, se abrazan, se disfrutan y se ponen de acuerdo para continuar, con Giorgio, al contrario, ya antes de que salga de la sala de migración y equipaje debes mirar y buscar donde trabajará, que velocidad de internet tienes disponible por donde el viajará, que ruta debes hacer, donde irán todas y cada una de sus valijas porque cada una tiene una función e importancia, debes procurar el agua que su cuerpo necesita y debes poner toda tu persona y atención en los detalles que generalmente no resuelves hasta que no estás frente a ellos.

Con Giorgio debes ir siempre tres, dos o como mínimo un paso delante y debes transformar todo lo que te rodea en una trinchera para luchar, una redacción periodística, una oficina, un centro de operaciones y de batalla. Y es en esos momentos, tan aparentemente materiales, operativos, prácticos, superficiales en los que te das cuenta de la lucha continúa de la luz contra la oscuridad. La lucha espiritual en la que nuestra Obra está sumergida no se manifiesta solamente místicamente, etéreamente, mágicamente y/o cinematográficamente. Cerca de Giorgio te das cuenta que se manifiesta muy materialmente, cotidianamente, operativamente, te das cuenta del poder del mal sobre todo lo que nosotros conocemos como mundo físico, tangible, en el que estamos sumergidos hasta el tuétano.

Si no pusiste atención en el internet o pensaste que por un rato sin él estaba bien, es en ese momento que ocurre algo importantísimo en la redacción o en el mundo y es imprescindible que justo en ese momento estuviera listo. Todos tus sentidos deben estar despiertos y todas nuestras estructuras culturales deben ser destruidas para evitar que un detalle se transforme en una pequeña derrota. Ya desde el primer momento te pones alerta y al servicio y Giorgio desde el segundo mismo que sale de migraciones trabaja, opera, escribe, llama por teléfono, corrige, dirige. La redacción espiritual, la de antimafia, los problemas humanos colectivos y personales, las cuentas atrasadas que deben ser pagadas, las conferencias, todo, absolutamente todo pasa por sus manos, su teléfono, su inteligencia fascinante y su capacidad operativa.

Y donde nosotros no observamos y no prestamos atención hasta alcanzar la perfección operativa, allí golpea la oscuridad. Y comprendes que es verdad que puedes dominar la materia, que es verdad que puedes vencer al maligno, que es verdad que puedes ser instrumento del Padre, solo basta estar física, mental y espiritualmente concentrado y al servicio total de la pequeña misión que en ese momento estás desarrollando. Sea como organizador, como acompañante, como maletero, como amigo, como hermano. Nadie está de más en el dibujo Divino, todos pueden y tienen una tarea que por mínima es siempre importante si uno se olvida de lo que quiere satisfacer de si mismo y piensa solo en el objetivo del encuentro.

LA OPERATIVIDAD

Los minutos para los abrazos son muy pocos, de inmediato debemos dejar atrás las emociones del reencuentro, los momentos en los que más nos extrañamos, la necesidad de tocarnos y abrazarnos. De inmediato debemos enfocarnos en lo que nos espera en los próximos 20 días.

Un café para que Giorgio tome fuerza para el viaje en auto de más de 6 horas hacia Las Parejas es la escusa para comenzar a organizar a los chicos. Más de 35 chicos convivirán y recorrerán miles de kilómetros juntos durante los próximos días. Tienen escuelas, plazas, teatros, reuniones, encuentros y mucho más que llevar a cabo en dos países diferentes y son pocos, demasiados pocos, los días que tuvieron para poder organizar y concretar todo. Pero así es nuestra Obra, nada es estático, todo cambia en un segundo, todo es a costa de esfuerzo, de imaginación, de ganas, de tolerancia, de improvisación inteligente y de magistral desarrollo.

Sobre los hombros de Matias, Sonia Tabita, Leandro, Diego y sobre todo de Giorgio está el peso de esta pequeña misión de apertura final del Tiempo. El Cielo no nos da tregua, no nos ofrece todo como nos sería más cómodo. El Cielo nos empuja siempre al último momento a aprender a recibir lo que nos da y como nos lo da y en el momento que nos lo da. No nos da la certeza de meses de organización y de hacer todo muy cómodamente. El Cielo nos da lo mínimo o a veces parece que ni siquiera lo mínimo para enfrentar una batalla, pero nos da una imaginación vastísima para poder hacer frente con las herramientas que poseemos. Y tenemos que decidir hacer todo sin nada y tener fe que a medida que se avanza esa nada se vuelve en lo mínimo necesario y a veces hasta en un consuelo.

Los chicos se organizan para llegar de todas partes, unos haciendo auto stop, otros compartiendo lo que tienen, algunos con un poco más de ayuda pero organizándose para que alcance para todos. La cosa es llegar y después ver como seguir y como volver. Detrás están las ganas de hacer, de comenzar y de luchar como cada uno sabe hacer.

Una vez llegados a Las Parejas con un calor de más de 30 grados y muchísima humedad una persona del “mundo” desearía descansar, más si viajó desde el día anterior y muchísimo más si porta en su cuerpo Las Señales Divinas y el cansancio del cambio horario, sumado a la intensa agenda desarrollada antes de partir… una persona del mundo, claro. Pero Giorgio no es del mundo y una vez llegado debemos, bajo la supervisión continua y omnipresente, loable e incondicional de Sonia Alea, instalarle a Giorgio su lugar de trabajo, enseguida salen afuera un montón de herramientas y libros que utiliza cada vez que se pone a trabajar y que lo acompañan siempre en su eterno peregrinar por el mundo y las ciudades italianas.

Todos estamos muy cansados, super cansados y acalorados, solo pensamos en una ducha fresca y en comer el sabroso asado que nos preparó Leandro, el hijo de la servicial Lorena, que trabajan en el campo él y en la casa misma de Juan Alberto ella. Pero Giorgio no, Giorgio solo piensa en ponerse a trabajar y en recuperar las horas perdidas durante el vuelo en el avión. Así que un almuerzo rápido, una ducha que tomamos nosotros casi con vergüenza frente al ejemplo que nos da nuestro amigo Giorgio que solo pidió cambiarse la camiseta traspirada y un café y ya nos espera trabajando desde largo rato en una mesa que se transforma en su único espacio durante los días de estadía.

Los chicos parten hacia Rosario, tienen que organizar el viaje hacia Salta que emprenderán al otro día. Y los nervios, la ansiedad, las ganas los embarga. Los chicos de Uruguay están de viaje desde Montevideo y algunos de otras partes de Argentina y de Paraguay ya están llegando. Son más de 20 los que tienen la tarea de arribar a Salta, armar e idear un espectáculo, ir al cerro y visitar varias escuelas. Son muchos los que estuvieron disponibles para ir y no piensan en la comodidad, solo en trabajar.

Y puedo asegurar que más allá de la amorosa atención y recibimiento de Ramón, Sandra y de los que colaboran con Los Niños de San Juan, a los chicos la realidad los tocó y necesariamente en toda su humanidad. El amor no faltó, pero las comodidades del mundo occidental desaparecieron en el momento en que tomaron la carretera rumbo al Norte. A medida que se alejaban de la zona de confort de Italia, Buenos Aires, Rosario, Las Parejas, cada ciudad iba poco a poco haciendo desaparecer todo lo que consideramos básico y necesario cotidianamente, una cama donde dormir, un vaso de agua, una ducha, un plato de comida que podamos elegir. Cada cosa se fue esfumando y los chicos experimentaron en carne propia las carencias y las dificultades ajenas. Lo que ellos denuncian como básico para subsistir, pero inexistente para muchos, la pobreza que delatan, las diferencias sociales contra las que combaten fueron, durante el viaje, parte de ellos mismos. Durmiendo en el suelo unos pegados a otros, calentándose entre si, comiendo de las donaciones que la Fundación recibe y que es lo mismo que se distribuye en los cerros y pueblos y, además, al mismo tiempo trabajando, creando, escribiendo, llevando adelante la misión por la que atravesaron Argentina hasta casi la frontera con Bolivia y Chile.

Pero siempre con alegría, con deseos de vivirlo, con dificultades humanas que se superan trabajando y con un objetivo único: el Movimiento.

Eso pretende ser Our Voice y eso es Our Voice, un Movimiento Militante que busca alcanzar un objetivo, crear conciencia, preparar el terreno para plantar la semilla fertilizándolo con sus propios ejemplos cueste lo que cueste.

Mientras Our Voice desarrolla su programa en Salta que fue concretado con el estreno de la nueva Obra teatral llamada “Limbo”, en la casa bunker de Las Parejas Giorgio trabaja incansablemente, de la mesa al baño, del baño a la mesa y en la noche ya tarde al dormitorio que Alejandra siempre les prepara con mucha delicadeza y entrega para poder descansar lo que logre. Dos, tres, quizás tenga suerte y descanse 4 horas. Ese es todo el descanso físico de Aquel que grita en el desierto, esa es su vida continua, quizás alguna vez se salga de esto, pero siempre en su computadora y mire una película, pero cada 10 minutos revisa el correo, los mensajes, las noticias.

Capaz alguno piense que Giorgio cuando viene a Sudamérica descansa, se distiende y que los que lo acompañan se dedican a conversar por horas sobre las enseñanzas espirituales que él nos tiene acostumbrados a recibir, pero nada más alejado de la realidad, el enseña si, todo el tiempo, a cada segundo, la vida cerca de él es como hacer una Maestría eterna y nunca se dará la premisa de que el alumno superará al Maestro. Pero enseña con su dedicación, con su constancia, con su metodología al dirigir todas las aristas de la Obra, al estar pendiente hasta si en el auto que viajaba una chica embarazada hacia Salta estaban las comodidades para no hacer sufrir al niño que lleva en ese vientre. Enseña cuando hace lo que debemos hacer nosotros y piensa en lo que nosotros deberíamos pensar. Enseña cuando vive en el mundo y nos muestra cómo vivir en él, como trabajar en él, como actuar en él, como sobrevivirlo y como superarlo. Podría en esta crónica dedicarme a trascribir lo que dijo, lo que nos regaló, lo que nos habló y que todos bebimos desesperados y esperamos meses para escucharlo como si fuera siempre la última vez que lo hagamos. Pero no, porque creo que está la otra cara, la otra faceta que sella aquello que sale de su boca. Está la misión silenciosa del accionar, de plasmar en la Tierra lo que viene del Cielo a través de él. Y no es llover sobre mojado decir: “Por sus frutos los conoceréis”.

EL EJEMPLO VIVO

Se va acercando el momento del encuentro espiritual con las arcas sudamericanas y la rutina laboral solo se quebraba porque la acción de los zigos justicieros que se expresaron, en este caso, en tormentas anómalas que anunciaban la presencia de la Verdad en esas Tierras recibían la respuesta del maligno poniendo la mano sobre lo que el hombre crea, solo allí puede actuar. Solo allí le permitimos o lograría detenernos en la misión, con algo que podría ser insignificante como hacer caer el internet. Nosotros, simples personas, en un caso así, con las mejores intenciones y las ganas de Obrar nos pararíamos y consideraríamos imposible seguir trabajando, dejaríamos los mails para responder en otro momento y la divulgación para más tarde o incompleta, pero Giorgio no.

Giorgio se inventa, busca, se ilumina con una idea, de cómo seguir, pelea, batalla, agota las posibilidades, sean las que sean y sigue. No hay nada que lo amedrente. Porque cada nota, cada noticia, cada escrito, cada intervención, cada comunicación con los diferentes jueces y fiscales son las balas de esta batalla y renunciar a seguir porque algo aparentemente nos obstruye es desperdiciar esas balas, es dejar avanzar al enemigo, es perder el precioso tiempo que ya no tenemos.

Humanamente nos vemos frustrados frente a algo que nos supera, pero espiritualmente siempre hay una razón que no vemos, muchas veces lo vemos como un castigo porque nos causa malestar, pensamos en lo que podríamos haber hecho, pero no hicimos, en como podríamos haber evitado el malestar o el entorpecimiento del trabajo de Giorgio, sufrimos adentro, pero la intervención de la metodología práctica del Cielo nos alimenta siempre de buena comida. Esto y muchas otras cosas Giorgio les fue inculcando a los chicos en cada oportunidad que se presentaba, a cada uno de ellos, los llamaba individualmente y colectivamente, a cada momento, en cada hora, cuando menos lo pensábamos el pedía hablar con alguno en particular y se materializaba así lo que el Cielo le pidió de hacer en este nuevo tiempo, que para mí, comenzó en este viaje. Prepararlos para el epílogo triunfal de esta Obra y empujar, de esta manera, la manifestación Triunfal del Cristo.

LA REVELACIÓN

Los chicos que crecimos, parimos, seguimos, educamos, como pudimos, asumen el lugar que el Cielo les tenía preparado y se vuelven punta de lanza, la que herirá de muerte al dragón. Y nosotros adultos vamos convirtiéndonos en sus sostenes, sus amigos, sus siervos disponibles y tolerantes casi hasta permisivos. Con una metodología que quizás no es la que aplicaríamos y que hasta nos hace entrar en conflicto con nuestros conceptos estructurales sobre el orden, la Justicia, la enseñanza de valores. Porque solo conocemos la educación de la Tierra, y quizás algunos de nosotros también conocemos la educación que desde las estrellas se pretende que se imparta en la Tierra para lograr ser una super civilización. Pero este es el momento de que la Nueva Genética se manifieste en todo su esplendor a través de la educación que proviene del Padre. Aquella que sentimos adentro pero no logramos manifestar y que solo Giorgio podría impartir, porque para nuestra lógica humana es a veces difícil de entender, de observar, de aplicar, de desarrollar y solos fracasaríamos aún en buena fe. Como, de alguna forma, hemos fracasado con nosotros mismos. Mientras haya hambre, guerra, injusticias significa que estamos fracasando, que el mundo aún le pertenece al amo maldito.

Y nuestras fuerzas se van apagando y nuestros pensamientos se van anquilosando por puro proceso natural de nacimiento, envejecimiento, muerte, nacimiento. Y cuando nos tocó a nosotros ser los jóvenes del cambio, no logramos hacerlo y si hicimos alguno no logramos mantenerlo. Si fracasó la metodología que adoptamos, no lo sé, si fracasó el proceso espiritual de las masas, no lo sé, seguro que este sí. Pero si miramos con objetividad estamos regresando en el tiempo.

Quizás estaba escrito que así fuera. Quizás el tiempo era este y la semilla se plantó y ahora debe florecer, quizás era esta la generación que se menciona en las escrituras. Todo puede ser y nada puede ser al mismo tiempo, pero la guerra es sin cuartel y nosotros hemos vivido demasiado tiempo en este mundo infernal. Pero no pasamos inadvertidos y los mártires de esta etapa de la humanidad que ahora termina son reconocidos, admirados, recordados por nuestros jóvenes. Y cada cosa buena que les pudimos dar está dentro de ellos.

Junto con la Revelación del proceso que la Obra debe tener, viene la invitación misericordiosa del Padre a operar también ahora y ser el palo que sostiene la punta de esa lanza. La prueba de fe, de obediencia, de entrega, de vencerse a uno mismo se hizo visible para todos al mismo tiempo, así como fue anunciado. La prueba dentro de las pruebas que nos alcanzan a diario y nos encuentran cansados llegando a la orilla luego de mucho nadar en un mar de señales y vivencias y dificultades está en curso.

Si logramos transformarnos en operadores de este proyecto, bajo las condiciones dispuestas, rompiendo absoluta y positivamente nuestras estructuras mentales superaremos y venceremos el “castigo” que la Justicia Divina nos impondrá severamente muy pronto y a cada uno. Siempre dentro de la conciencia de eternidad, seremos invitados a renacer en aquellos que poblarán la Nueva Tierra que nuestros hijos prepararán, seremos los hijos de nuestros hijos. Extirparemos de nuestra Genética Celeste el cáncer insertado por el Rey de este mundo y la haremos expandirse más allá de este mundo, regresándola, también a las estrellas.

EL PASAR DE LOS DIAS Y LAS ETAPAS SUPERADAS

Los días pasaban para los chicos en Salta, donde los frutos comenzaron a verse de inmediato. Muchos jóvenes están ansiosos por tener un lugar dentro del Movimiento y formar parte de esta Verdadera Revolución Cultural que se está gestando poco a poco pero rápidamente y sin dejar respiro a los que están más comprometidos con las actividades, dirigiendo y coordinando los diferentes grupos.

Our Voice es un sueño humano ideado por el Cielo, desde el primer momento y basta ver el proceso de la Obra, de la historia, de la sociedad, de Giorgio mismo, de los chicos. Y por ser humano se enfrenta a dificultades siempre materiales, la mayoría son chicos que estudian y no tienen trabajo o están en su primer trabajo recibiendo muy poco dinero. Entonces los esfuerzos de algunos padres, de todos los hermanos, se vuelve imprescindible, las tareas son muchísimas y los que pueden dedicar todo el tiempo disponible son muy pocos. Eso implica una renuncia total a la independencia económica que todos persiguen como meta principal en este planeta. Y ese es el primer ejemplo que nos dan estos chicos, hay quienes dependen de los otros compañeros del Movimiento para comer, vestirse, dormir, para decidir si se puede comprar un agua porque se tiene sed o de comerse una pizza luego de un día agotador. Ejemplo que estos chicos tuvieron en algunos de los que somos operadores full time en la Obra. Ellos vieron lo que significa no poseer nada, que no sabes si hoy puedes pagar la luz, si tendrás mañana para pagar la sala de una conferencia, o que debes hacer una conferencia con la dificultad de que llegaste a ella pero no sabes cómo harás para regresar a casa. Y no tuvieron miedo, dijeron si a esa vida, a esa entrega, a esa disposición total de cuerpo, mente y espíritu. Aprendieron también de la solidaridad de los hermanos para solventar esas actividades y algunos se organizan para ser el sustento y otros para hacer que ese sustento sea honrado en dedicación total y frutos. También aprendieron a ser absolutamente agradecidos con cada hermano que hace posible que estos viajes y actividades se logren llevar a cabo y que creen en Giorgio y en este proyecto del Cielo tanto como para sostenerlo. Porque el mensaje principal se ha logrado llevar con la acción misma de la realización de los espectáculos. Teatro con entrada libre es ya de por si un hecho revolucionario. En una sociedad que se lucra con el arte, la expresión humana más trascendental. En una sociedad creada sobre los valores tales como que para culturizarte, expresar las pasiones que puedan construir en el otro y fomentar acciones favorables para el entorno, debas pagar porque el artista debe cobrar para vivir, el hecho en sí de realizar eventos artísticos y culturales con entrada gratuita en teatros y en las plazas y no pedir nada a cambio, (como estamos acostumbrados a ver y que es hasta justo), ni siquiera cubrir los gastos que implica el traslado de equipos, la locomoción de los propios chicos, los gastos del alquiler de audio, es la manifestación concreta de las bases que sostienen el movimiento.

En Salta no fue la excepción y eso hizo que el teatro se llenara por completo.

Todos podían asistir por igual, pobres y ricos, cultos e incultos. Jóvenes y no tan jóvenes. Todos vieron “LIMBO” una obra magistral creada en pocos días, ensayada en dos días y representada con una fuerza y convicción tal que el hecho de no ser actores profesionales no resultaba incómodo para ningún crítico teatral.

Mientras tanto también visitaron escuelas y medios de comunicación, realizando un esfuerzo humano loable.

REUNION DE ARCAS

Mientras en Salta los chicos culminaban sus presentaciones los hermanos de las diferentes arcas de Sudamérica iban llegando para la reunión tan anhelada. Giorgio se dividía entre seguir a los chicos, organizar las próximas actividades en Montevideo, organizar como llegar, éramos más de 20 personas que viajaríamos juntos y todo era supervisado por él. El viaje a Montevideo Giorgio lo haría junto a la mayoría de los chicos. Partiendo desde Rosario en un ómnibus Pullman de línea y otros lo harían en auto, pero todos seguirían juntos y además se le sumarían más chicos que no fueron a Salta y vendrían a la reunión de las arcas en Las Parejas y otros tantos más en Montevideo. También hacía el seguimiento de las páginas espirituales, las de antimafia y atento a lo que el Cielo le deparaba, sea a través de un mensaje o el llamado a vivir una nueva y enésima Pasión. La reunión de las arcas sería muy importante y se sentía muy profundamente la ansiedad de los hermanos y se podía ver que Giorgio se iba concentrando más, hablaba menos y su mirada iba cambiando. Una participación desde casa en el programa de radio de los hermanos de Rosario “Tierra Viva” al que se le sumaron Sonia Tabita desde la ruta de regreso a Las Parejas y otros hermanos como Alicia Conti y Georges Almendras para los diferentes programas radiales de la Obra, fue el hecho destacado del día anterior a la reunión. Las declaraciones laicas, profundamente sociales de Sonia Tabita que demuestran que su proceso de crecimiento va en aumento y cada vez más rápido se complementaban con los conocimientos místicos que Giorgio nos regaló de una forma mágica y única, demostrando, una vez más, el encastre perfecto de la última pieza del puzzle que conforma esta Misión Sagrada que ellos dos, padre e hija representan y encarnan.

Y sucedió lo que se esperaba cada vez que un evento profundo acontece y donde la presencia Crística se manifestará.

Donde dos o más de dos se reúnan en mi nombre, allí estaré.

Los que nos encontrábamos en la casa de Juan Alberto y Alejandra, prontos para salir a la reunión, fuimos testigos inmerecidos del llamado del Cielo para revivir, una vez más, la Pasión de Cristo. En todos estos años fueron muchas las oportunidades que el Padre me ha dado para contemplarla en el silencio de mi ser.

Algunas consolando a Mi Maestro, pidiendo poder compartir un poco del dolor para que sea menos el sufrimiento del Ser que yace en la cama y que una hora antes estaba detrás de una computadora trabajando parado porque el dolor en los nervios de sus piernas y músculos por tantos años de llevar impreso en su cuerpo Las Sagradas Señales, es tanto que busca alternar las posiciones para poder seguir trabajando, sin descanso. Otras veces siendo testigo de las emociones que expresan las personas frente al milagro y siempre y cada una de esas hablando conmigo misma, intentando callar mis pensamientos para compenetrarme por completo con el momento siempre Sagrado. A veces corremos el riesgo que debido a estar presentes tantas veces y en tantos momentos frente a La Pasión de perder la conciencia real de lo que estamos testimoniando, permitiendo a los pensamientos y preocupaciones humanas invadir nuestra mente y contaminar el corazón que debe mantenerse puro y receptivo a semejante manifestación. Manifestación que el Cielo nos regala siempre por motivos ignorados por nosotros pero que están ligados profundamente a nuestro Ser y sobre todo a lo que debemos dar a los demás de nosotros mismos. Porque cuando se nos permite el honor de vivenciar algo así tan grande, de estar al lado de un Maestro, como lo es Giorgio, cuando se nos da la oportunidad de operar dentro de esta misión, nunca es para privilegio personal, sino para asumir una responsabilidad con el prójimo, volcar hacia nuestros costados cada abrazo, cada momento compartido, cada risa, cada palabra escuchada que sale de su boca y estamos cerca para oírla, todo eso es para brindarse por completo a la vida del otro, no para tenérselo egoístamente para uno saciándose a sí mismo. Estamos allí para ser testigos de su vida, de su obra, de su coherencia, de su humanidad interactuando entre el Cielo y la Tierra. Siempre digo a mis hermanos que estar a su lado es por una sola razón, por ser los peores de todos. Desde todo punto de vista, pero sobre todo espiritual, por eso me ponen y nos ponen al lado de un Maestro, como hacían en la escuela. Acaso ¿donde sentaban a aquel que se “portaba” peor, que desarmonizaba en la clase y no sabía trabajar tranquilo en las tareas asignadas? Lo sentaban en el escritorio de la Maestra, ella se lo ponía a su lado para que no moleste en clase. El Cristo vino por los suyos, nosotros, los peores, los que nos quedamos en el camino evolutivo detenidos momentáneamente. Y Nuestro Maesto continúa recordando en su cuerpo la razón de nuestra existencia, nos lo sigue permitiendo ver con los ojos físicos de la materia porque aún no lo logramos realizar en el espíritu.

El sufrimiento era grande, se podía casi tocar y meterlo dentro de uno, el peso de Nuestra Cruz en sus espaldas se manifestaba en su mirada y el andar de esos pies sangrantes que pisarán minutos después donde nosotros pisamos al entrar en la habitación nos indican por donde debe ir nuestro propio caminar, nos invita a caminar su senda que es de sufrimiento humano y hasta físico pero de plenitud y certeza espiritual como no nos podemos ni siquiera imaginar que exista.

LA SEÑAL

Esos pies sangrantes que apenas podían moverse, que aún olían a Rosas y con la Sangre Sagrada aún fresca no solo salieron de la habitación donde el milagro se produjo. Esos píes no solo se pararon donde nuestros zapatos indignos pisaron durante la sanguinación, no solo eso. Sino que desnudos continuaron caminando hacia donde estaban los hermanos. Esos pies desnudos, se subieron a un auto, anduvieron unos cientos de metros y fueron al encuentro de todos nosotros. Esas manos que escriben artículos periodísticos para denunciar el mal y se alzan para señalar las injusticias, esas manos que escriben mensajes del Cielo, sangrantes aún, tomaron la mano de quien fue enviada hacia nosotros para hacer el llamado final. Los pies desnudos nos indican el camino, nos invitan a seguirlos y las manos nos traen hacia nosotros la última señal, la manifestación que el cumplimiento de las profecías sagradas está en pleno cumplimiento. Que todo es real, es verdad, que el Armaghedón está en curso y que estamos participando en él. Giorgio fue saludando a los hermanos uno a uno, fundiéndose en un abrazo eterno.

Ver entrar a Padre e Hija de la mano, me conmovió profundamente e impregnó el ambiente de la vibración justa para todo lo que viviríamos en esos dos días de encuentro, porque en ese gesto se expresaba visualmente todo lo que luego se hablaría en la reunión.

EL CAMBIO

No pondré textualmente lo que Giorgio desarrolló en la reunión a la que asistieron más de 200 hermanos de las diferentes arcas, sobre todo de Argentina y en la que se pudo expresar libremente los sentimientos de cada uno, hablar sobre las tareas que se están desarrollando en cada grupo y sobre todo Giorgio con una claridad contundente expresó las nuevas directivas para las arcas y los grupos operativos. Explicó profundamente la misión de Our Voice y cada representante debía expresar lo que pensaba de los cambios operativos y de Our Voice como expresión viva y concreta de la nueva etapa en la que estaba entrando la Obra.

Los cambios sacuden la conciencia, hacen salir lo mejor y lo peor que tenemos dentro, nos enfrentan a nosotros mismos y ponen a prueba nuestras capacidades de adaptación. Los cambios en nuestra Obra ponen en primera línea nuestros más profundos temores, porque son cambios que repercuten en nuestros caminos espirituales. Ponemos a trabajar nuestras virtudes para intentar creer en ellos pero también operan nuestros defectos y dudas más sutiles. Cada uno realiza como entiende y como puede el proceso, pero la fe y la certeza de estar en el camino correcto deben ser la bandera que saludemos junto al Sol cada mañana.

Los cambios producen decantaciones en los grupos humanos, movimientos de personas debido a si resultan cómodos o no para nuestra psiquis estos cambios porque instintivamente solemos estudiarlos con la mente, para luego entenderlos con el espíritu.

Pero ¿hay un cambio realmente, o se trata simplemente del lógico devenir de los hechos profetizados? Hechos que al estar allí palpables, tan palpables, tan cerca nos aturden. Nos paralizan porque los esperábamos de otra manera. Hemos hablado tanto de las profecías y especulado tanto sobre aquellos que la deberían hacer cumplir que no logramos verlos cuando se presentan delante nuestro. Y estos vendrían a hacer manifestar la Justicia. El que tenga ojos para ver verá.

LA COMUNIÓN

Luego de la reunión esclarecedora del día anterior llegó el momento de recibir el pan y el vino. Y fueron Fátima y Leandro quienes formaron parte de la Liturgia, acompañando a Su Maestro, nuestro Maestro, en cada Sagrado instante en que el Cuerpo y la Sangre de Cristo se hacía Uno con nosotros. Y al mismo tiempo, Uno con Ellos.

Momentos únicos plasmados en el alma. La suave música actúa como vehículo transportador hacia nosotros mismos y el acto de fe, de entrega, de compromiso sella el pacto con el que ponemos a disposición nuestras almas.

Luego de estos momentos eternos y únicos, Giorgio dio lugar a preguntas y a que todos los que necesitaban de su consejo, palabra o apoyo pudieran acercarse a él.

Finalmente llegó el cierre del encuentro y Giorgio hizo pasar a todos los chicos junto a el, la alegría se transformó en canciones cantadas desde el alma y la Revelación llegó a todos nosotros con la sutileza de lo que no se puede decir pero se debe hacer comprender.

Un encuentro más, una nueva etapa, nuevas y cada vez más definitivas pruebas se ciernen sobre nosotros y la Obra que camina, siempre, más lento, más rápido, pero camina.

OUR VOICE

Mientras la mayoría de los hermanos estaban llegando a sus casas con el corazón y el alma llena, para Giorgio y los chicos la misión en Sud América recién iba por la mitad.

Mientras nosotros preparábamos el viaje a Montevideo, los chicos se iban organizando para una reunión operativa y metodológica con Giorgio. Our Voice también tendría pequeños cambios, en cuanto Giorgio se haría cargo en primer lugar de cada actividad y detalle.

Todos sentados alrededor de una gran mesa escuchaban con atención las nuevas directivas, intercaladas con las preguntas que pudieran surgir. Cada punto fue aclarado y cada inquietud expresada con honestidad y espontaneidad. Los pocos adultos presentes allí nos deleitábamos con la capacidad de relacionamiento, de organización y la simplicidad con la que Giorgio y los chicos se iban poniendo de acuerdo. Los frutos de una idea que nace, se desarrolla y se concretiza del fruto sincero del amor, sin egos, sin objetivos personales, solo colectivos. Por la imperiosa necesidad de imponer la Justicia en un mundo amoral, hipócrita y vacío.

Luego compartir un almuerzo rápido y emprender el camino hacia Rosario desde donde tomaríamos un bus hacia Montevideo, nuestra próxima escala.

EL LIDER, EL AMIGO, EL COMPAÑERO

En la estación del bus tuvimos que esperar un tiempo, por lo que Giorgio se dedicó a trabajar en la computadora que lo acompaña a todos lados y los chicos conversaban entre sí. Unos comían algo, otros deambulaban y otros seguían atentos con sus ojos cada movimiento de su amigo. Llegó el momento de tomar todas las valijas y caminar unos cuantos metros hasta el andén desde donde partiría el bus. Entonces Giorgio fue uno más y entre chistes y órdenes disfrazadas los fue conduciendo en masa y muertos de la risa hacia el lugar indicado en los boletos. Muertos de la risa nosotros, disfrutando el momento y muertos del asombro los demás pasajeros que se encontraban en la estación, vimos como Giorgio conducía a su rebaño con la alegría de ser uno más entre ellos, con la determinación de un líder y la delicadeza de un compañero. Es en esos momentos, cuando lo ves libre entre los jóvenes que comprendes todo. La alegría de existir manifestada en su máxima expresión, la esperanza que te alcanza el corazón y te dice que ese es el camino.

Giorgio no es un Maestro que busca hablar y que todos escuchen en silencio, no es un Maestro que exige devoción y respeto por el solo hecho de ser la autoridad. Giorgio los deja libres, los empuja a expresarse, a ser ellos mismos. Giorgio busca aprender de ellos, pero aprender honestamente. Giorgio busca hacer germinar en ellos la semilla sin tutores en el tallo, sino que libremente hacia el infinito y como sea que crezca.

MONTEVIDEO

Una vez llegados a Montevideo los chicos no se dieron respiro… bueno, Giorgio tampoco. A pesar de haber viajado toda la noche, de inmediato la computadora, los libros, los diarios y demás cosas ocuparon su lugar en el escritorio de Giorgio en nuestra pequeña oficina. Y los chicos se organizaron para ir de inmediato al arca, donde poseen allí su propio espacio. No había tiempo que perder. Tenían 3 espectáculos callejeros, dos teatros, una entrevista de prensa, una radio, varias reuniones y un sinfín de actividades para llevar a cabo en menos de 10 días.

El pasar de los días los iba fortaleciendo y cada vez tomaban más fuerza en sus acciones y decisiones. Los ensayos eran eternos y Sonia Tabita se dedicaba a cada uno de los actores. Solo que esta vez Limbo no iba a ser como en Salta, esta vez tendría un personaje que le daría una vuelta de tuerca, el propio Giorgio se subiría a las tablas a impregnar con su impronta el mensaje. Su presencia en los ensayos producía muchísima ternura y al mismo tiempo nos alertaba de que el tiempo es este. Entre sus actividades con la redacción antimafia y las preocupaciones por la seguridad de los amigos que el había dejado en Italia, el teatro también pasó a formar parte de sus días y se transformó en discípulo de su hija, en aprendiz del Movimiento que el mismo lideraba. Era un estudiante que, sabiendo perfectamente la letra, quería aprender a representarla a través de otro camino. Y con un simple: “No hay más tiempo”. Todo se concreta.

Montevideo siempre fue un lugar particular dentro de la Obra. En Uruguay recibió dos de sus estigmas, allí vivió por casi 4 años y es donde Sonia Tabita pasó parte de su infancia, siendo ella misma, la que inauguró el arca física. Hoy esa misma arca se transforma en un espacio destinado a recibir a todos los jóvenes que sientan el mensaje de Justicia, de lucha, de Amor y esperanza que los chicos embanderan. Hoy quitamos el cartel que daba a la calle del local y que decía “Del Cielo a la Tierra”, que con tanto orgullo pusimos hace más de 10 años y colocamos en su lugar el que señala que allí se continúa luchando. El Águila permanece allí pequeña hacia la derecha, como emblema perenne de nuestra historia y nuestro presente, pero el logo de Our Voice ocupa el lugar más importante, muy simbólicamente a la vista de todos los transeúntes.

Las entrevistas radiales y de prensa fueron humildemente maravillosas. En los estudios de la Radio Nacional, la hija del famoso periodista Omar Gutierrez que tantas veces entrevistara a Giorgio, esta vez entrevistó a Sonia Tabita. Dos generaciones que se entrecruzan en los destinos de la fe y de la divulgación de ideales y valores espirituales. Desde su escritorio y por teléfono Giorgio le puso su voz a la tarde y desde estudios Sonia Tabita le puso la música que acompaña a la Verdad.

Más tarde una entrevista concedida a la “Izquierda diario” retumbó fuertemente en nuestros corazones, ya no había vuelta atrás. El Movimiento se identificaba, cada vez más, con las minorías, con los que sufren, con los que deben alzar la voz y los puños, esta vez a través del arte, contra los opresores, dueños del mundo y del hambre. Declaraciones contundentes, inteligentes, profundas, llenas de lucha, de valores, de verdades. Declaraciones que marcan un rumbo, un único rumbo. Una meta, un objetivo. Declaraciones que evidencian al Testigo. Al otro Testigo.

Los días se escaparon como el agua entre los dedos y llegó el momento de la partida, las reuniones finales, las recomendaciones y las planificaciones fueron las señales del fin de este viaje y el principio del próximo.

Seguramente quedaron muchas cosas por decir, por contar, por describir. La vida junto a Giorgio es muy intensa, profunda, llena de trabajo y el tiempo corre, entre muy pocas horas de sueño y mucho más de 24 horas de trabajo.

El barco que los lleva a Buenos Aires parte y nuestros espíritus se van con ellos, pero nuestros cuerpos quedan allí apagados, estáticos, tristes por la separación pero conscientes de que se debe continuar luchando. Por nosotros, por el mundo, pero sobre todo por ellos. Por Our Voice, nuestra voz.

Erika Pais.

11 de diciembre 2018