“He aquí que voy a hacer en Israel una cosa tal que al que la oiga le zumbarán los oídos”
... Con esta frase bíblica que inexplicablemente me volvía a la mente continuamente, decidí acostarme porque me sentía ligeramente mareado, era algo inusual porque nunca tengo mareos.
Después de unos minutos vi claramente frente a mi, con el ojo de la mente, el Planeta Tierra que estaba suspendido en el Espacio. Detrás de la Tierra, se recortaban sobre el fondo estelar dos gigantescos Genios Solares vestidos con largas túnicas blancas que brillaban como la nieve al Sol. Estaban uno al lado del otro. El que se encontraba a mi izquierda (es decir, a la derecha del planeta Tierra) tenía su brazo derecho levantado y empuñaba un resplandeciente rayo en forma muy amenazadora y altiva, mientras que su mano izquierda estaba apoyada en el Polo Norte Terrestre. El otro Ser empuñaba en su mano derecha una larga lanza, sin levantarla. No decían nada pero fijaban sus grandes ojos en los míos. Su expresión severa me provocaba terror pero al mismo tiempo me hechizaba, me hicieron partícipe de un profundo e inusitado sentido de la Justicia, era un sentimiento que en pocos instantes erradicó de mi corazón todos los males acumulados a lo largo de toda mi vida (y quizás más) e hizo que la luz de mi plexo solar se desbordara hasta el punto tal que llegó a iluminar toda la habitación y más, haciendo que las paredes fueran semi-transparentes. Yo estaba totalmente aterrorizado pero al mismo tiempo me sentía maravillosamente atraído por Su gallardía y por el Amor que emanaban estas enormes figuras, un AMOR VERDADERO, autoritario, noble, omnicomprensivo, hasta podría decir “prepotente”... un Amor que era una sola cosa con ese sentido de Justicia que estaba sintiendo tan fuerte y tan pasional.
Finalmente concentré mi atención en el ojo abierto que tenían en Su frente y mi pensamiento se hundió en el Sol de Su tercer ojo... el canto de los pájaros presentes en el techo me hizo volar hasta la dimensión material, donde, a pesar de que la temperatura alcanzara los 30 grados, yo no dejaba de sentir escalofríos y de temblar, estos fueron pasando a los diez minutos aproximadamente, así pude esbozar la figura estilizada de los Seres Solares, claramente sin ninguna pretensión estética...
Luego de algunas horas el extraño mareo aún no había pasado y me volví a recostar para relajarme y tratar de recuperarme con un poco de pranoterapia. En ese momento recordé que hacía algunos días mi amada Francesca había visto en el cielo una gran astronave cerca de casa, alrededor de las 06:30 hs...
De repente los dos Seres volvieron a manifestarse frente a mi. Si bien antes estaban uno al lado del otro esta vez estaban uno detrás del otro. Eran enormes, no lograba comprender cómo podían entrar en el mismo espacio de mi habitación que, comparado con su contextura física, parecía un dormitorio para enanos. Estaban suspendidos en el aire a los pies de mi cama, rodeados por una aura luminosa, blanquecina y transparente, era un plasma límpido que parecía cumplir alguna función que los ayudaba a manifestarse en esta dimensión. Su mirada emanaba infinita bondad, pero era una bondad sabia, espontánea y reflexiva al mismo tiempo, pero no melosa, no era una bondad “ligera” sino poderosa, heroica, que provocaba de nuevo en mi el mismo sentimiento de Amor/Justicia que había sentido unas horas antes. Eran dos Maestros.
Telepáticamente, el Ser que se encontraba frente a mi me ordenó amablemente que me pusiera en la posición faraónica, es decir, con los brazos cruzados y con las muñecas superpuestas en el pecho de manera tal que las palmas quedaran dirigidas hacia los hombros y los pectorales. Lo hice. De esta forma, me dijo, se generaría un encapsulamiento energético alrededor de mi persona. En efecto, al ponerme en esa posición advertí un flujo magnético que partía de mis pies y que iba subiendo gradualmente hasta mi cabeza, pero lo iba haciendo en dos flujos paralelos que se deslizaban adelante y atrás para envolverme en una crisálida de plasma adherente al cuerpo. Cuando ambos flujos confluían en mi cabeza, a la altura de la mollera, pude percibir cómo el proceso de encapsulamiento se había completado y sentí la extraña voz del Maestro que lentamente me decía: “AHORA ESTÁS LISTO PARA RECIBIR EL MENSAJE”.
Me sentía muy feliz, a pesar de estar inmovilizado en esta posición, estaba envuelto por una energía que a esa altura parecía haberse solidificado y por lo tanto me encontraba en una especie de sarcófago translúcido. Honestamente, por un instante pensé en todos los relatos de los así llamados “secuestros alienígenas” y comprendí el miedo asociado con este tipo de experiencias, miedo que (como siempre) deriva de la ignorancia.
Estaba tranquilo y concentré mi mirada en el tercer ojo del Maestro. En ese momento comencé a ver y a escuchar el Mensaje, es decir, escuchaba lo que decía y mentalmente veía las imágenes-pensamiento relacionadas con el argumento. Por dicho motivo, para poder transmitir fielmente lo que aprendí tendría que ser acompañado por un buen director de cine, así como por un buen guionista, ya que las palabras escritas jamás podrían llegar a transmitir plenamente lo vivido. Invito a los lectores a que se imaginen el subseguir de las escenas visuales asociadas a los diferentes conceptos expresados en el discurso.
A continuación la primera parte del Mensaje:
“EL PLANETA TIERRA CORRE PELIGRO DE VIDA.Mi “descanso” consistió en quedarme mudo por la alegría, con los ojos abiertos mirando el techo...
Fin del “descanso”.
Segunda parte:
Al final del Mensaje me perdí en el Ojo de mi Maestro y me vi a mi mismo con otra gente en la orilla del mar, en una playa blanca desconocida, estábamos haciendo una especie de ejercitación. Todos teníamos la misma ropa, estábamos completamente empapados porque acabábamos de salir del agua, mientras que nuestro equipamiento difería levemente uno del otro. De alguna forma yo me había distinguido de los demás porque había saltado más alto. Luego salió del agua una gran astronave oscura que primero subió hasta el cielo y posteriormente bajó hasta donde nos encontrábamos nosotros y una vez que se iluminó me abdujo a través de un ascensor energético invisible. Sentí que había sido “salvado”. Al entrar a la astronave me encontré una vez más frente a los dos Genios Solares y mi Maestro me habló:
“HAS SIDO ELEGIDO PORQUE ERES VALIENTE. EN ESTA DIMENSIÓN HAS VIVIDO UNA ESCENA SIMBÓLICA: LA PLAYA BLANCA SIMBOLIZA LA LLEGADA A LAS ORILLAS SEGURAS DE LA INMACULADA VERDAD, DESPUÉS DE HABER DEJADO A TUS ESPALDAS EL PELIGROSO OLEAJE DEL OCÉANO DE LA EXISTENCIA MATERIAL. TÚ Y LOS DEMÁS ESTÁBAIS VESTIDOS CON UNIFORMES MILITARES IDÉNTICOS PORQUE QUIENES HAN SIDO LLAMADOS PARA COMBATIR LA BUENA BATALLA TIENEN TODOS LAS MISMAS POSIBILIDADES DE ÉXITO, AUNQUE TENGAN DIFERENTES PERSONALIDADES Y DIFERENTES TALENTOS. EL HECHO DE QUE HAYAS SALTADO MÁS QUE LOS DEMÁS INDICA HAS HECHO UN ESFUERZO MAYOR CON RESPECTO A ELLOS. GRACIAS A ESTE ESFUERZO TE HAS MERECIDO SUBIR A BORDO DE ESTA ASTRONAVE. SIN EMBARGO TIENES QUE SABER QUE LO QUE HAS VISTO SIMBOLIZA LO QUE PODRÍA LLEGAR A OCURRIR, NO LO QUE YA HA OCURRIDO, POR LO TANTO TE TIENE QUE SERVIR COMO ADVERTENCIA E IMPULSO PARA CONCRETAR ESE ESFUERZO QUE TE HARÁ LLEGAR A LA ALEGRÍA DE LA VICTORIA, YA QUE SUBIR A BORDO DE LA ASTRONAVE SIGNIFICA ENTRAR EN EL NUEVO REINO”.
En un abrir y cerrar de ojos me encontré nuevamente en mi cama, con los brazos en la posición egipcia, pero esta vez me encontraba boca abajo y tenía la frente apoyada en el Evangelio que usualmente tengo debajo de mi almohada... No se cómo pero durante la experiencia me di vuelta pero de todos modos mantuve los brazos cruzados. Ni bien pude me destrabé (con algunas dificultades) de la posición en la que me encontraba, tenía mucha sed, una sed indescriptible, entonces me levanté y tambaleando fui a buscar un poco de agua. Luego me volví a acostar porque tenía mucho frío, a pesar de que hiciera bastante calor.
Llegó la noche.
Los cantos de las oraciones árabes que se escuchaban desde la pequeña mezquita me llevaron poco a poco una vez más hasta esa dimensión. Entonces empecé a escribir esta historia pero mis pensamientos mismos me interrumpieron:
“He aquí que voy a hacer en Israel una cosa tal que al que la oiga le zumbarán los oídos”
... La frase bíblica seguía volviendo a mi mente como un mantra en mi mente y no podía escribir, entonces tomé el teléfono celular y puse la frase en un motor de búsqueda para saber algo más, pero internet me daba problemas... De repente recordé que esta frase estaba relacionada con un círculo de trigo, con un agroglifo aparecido hace algunos años... fui a ver y ahora internet funcionaba mejor entonces pude encontrar un artículo del investigador Pier Giorgio Caria que hablaba precisamente de este pasaje de la Biblia relacionado con un agroglifo en forma de espermatozoide. Recuerdo que desde el punto de vista cósmico los espermatozoides son cometas que transportan las genéticas informativas hacia las estrellas, que a su vez difunden estas informaciones genéticas a los planetas de sus sistemas solares. Me vino a la mente que el Aviso que la Divina Madre anunció a través de las niñas videntes de Garabandal es precisamente un asteroide, o algo similar. Me quedé impresionado por la correspondencia de las fechas, descubrí que el dibujo en el campo de trigo en cuestión se remontaba al primero de Junio de 2011, la experiencia que viví ocurrió entre el 10 y el 11 de Junio, de hecho mientras leía todo esto ya era de madrugada, por lo tanto ya era el 11 de Junio. ¿Acaso estos también son pequeños signos? No lo se, pero las “coincidencias” siempre me han hecho reflexionar.
A continuación encontraréis el link para poder leer el bonito e importante artículo escrito por Pier Giorgio Caria, con la introducción nada menos que de Setun Shenar y los Hermanos de la Luz, a través de Giorgio Bongiovanni, Estigmatizado:
http://www.unpuntoenelinfinito.com/pier-giorgio-caria/4401-circulos-en-el-trigo.html
Concluyo diciendo que estoy infinitamente agradecido a la Madre Celeste a quien siento especialmente cerca en estos días. Ella conoce todas mis peores debilidades y a pesar de todo me hace sentir Su Amor. A veces creo que Ella sabe todo de mi, me avergüenzo terriblemente pero esta es la Verdad y este es el Camino, no podemos escondernos de los ojos de los Dioses, pero podemos ser honestos con Ellos y con nosotros mismos y comprometernos a mejorar cada vez más, AD MAIOREM DEI GLORIAM… Ave María Purísima
Marco )+( Marsili
11 de Junio de 2017