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conferenzaporto100Por Marco Marsili y Francesca Panfili

Pier Giorgio Caria participó como orador en una conferencia titulada “Nosotros y los pueblos del Cosmos” que tuvo lugar en la Villa Baruchello de la ciudad de Porto Sant’Elpidio.

Ante la presencia de un numeroso público formado también por muchos jóvenes Pier Giorgio presentó numerosos documentos históricos sobre la visita extraterrestre y videos de extraordinarios avistamientos que desde los años cincuenta hasta el día de hoy han aparecido en nuestros cielos. Una realidad que ha sido ocultada y ridiculizada por la mayoría pero que ha quedado confirmada en la milenaria actividad de interacción entre la humanidad de la Tierra y seres mucho más evolucionados que nosotros. Pueblos que han llegado desde lejanos lugares del Universo y que han marcado las etapas evolutivas más importantes de esta desgraciada humanidad. Una humanidad que sigue en su alocada carrera hacia el colapso que ha sido anunciado varias veces por nuestros hermanos mayores que visitan nuestro Planeta y que nos invitan a realizar un serio, inmediato y repentino arrepentimiento. Pero al hombre de la Tierra le cuesta aceptar esta importante invitación.

Es más, como lo demuestran los hechos que ocurren en el mundo, éste ha ignorado todos los llamados a un cambio y día tras día incrementa sus acciones autodestructivas como asesinatos, guerras, carrera armamentista, destrucción del Planeta, hambre, enfermedades, contaminación, pedofilia, capitalismo, especulación económica y muerte. La verdadera contradicción es que aquellos que han forjado este modelo basado en la explotación y en la competitividad asesina son precisamente los pueblos occidentales, la burguesía de clase media, las clases adineradas, la buena gente que todos los días trabaja para llevar un pedazo de pan a su casa para compartir con sus hijos que en el día de mañana se convertirán en abogados, médicos, ingenieros, bancarios, al servicio de un sistema gravemente enfermo en su esencia. Es precisamente el Occidente la “cuna” de la cristiandad, la patria del catolicismo, el lugar en el que desde hace dos mil años se insinúa un poder institucional que ha hecho del abuo y del adoctrinamiento religioso su leit motiv para justificar guerras, para mandar a la hoguera a las mentes libres, para coaccionar a las masas, para vivir en el lujo, para vivir en la opulencia más desenfrenada, y para que los ministros de Dios manejen dinero y se corrompan renegando a Cristo y comunicándole a los Pueblos una enseñanza tergiversada para poder convertirlos en esclavos e ignorantes.

Sin embargo el hombre, creado a imagen y semejanza de Dios, tiene derecho al Conocimiento y al ejercicio de su razón que se ejerce a través de la explicación de las Leyes Universales que inundan la realidad manifiesta y la no manifiesta, permitiéndonos comprender la Verdad, hoy callada y manipulada, bajo todos los puntos de vista. “Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque ocultaste estas cosas a sabios y a inteligentes, y las revelaste a niños (Lucas 10, 21-12) dijo el Hijo de Dios, invitando a los hombres de buena voluntad, que aceptaron Su mensaje de salvación, de liberación y de conocimiento, a no creer, ni escuchar a los poderosos y a los manipuladores de la Ley que Él nos ofreció.

Por lo tanto se trata de comenzar a analizar y a estudiar la realidad en la cual vivimos sin caer en las trampas conceptuales de un mercado informativo que, a través del mundo de la IN-FORMACIÓN, plasma, forma y modela una capacidad de análisis social distorsionada, útil al poder para seguir oprimiendo a las masas bajo su yugo. Este ejercicio de inteligencia que la humanidad, o mejor dicho, los pocos seres humanos que aún saben razonar en forma libre y que sienten empatía, o rabia, por cada uno de sus pares en dificultad, pueden realizar, siendo ayudados por civilizaciones e inteligencias que vienen de otros Planetas, que han llegado hasta la Tierra para ayudar, aconsejar y compartir por amor, solo por amor, una visión diferente de la realidad. Una visión fundamental y siempre actual que despeja toda duda sobre nuestra verdadera naturaleza humana y divina.

Cada vez que escucho la explicación de estos conceptos me alegro porque durante años me he preguntado si alguna vez encontraría una explicación que respondiera a todo lo que tiene que ver con el ser humano y, sobre todo, con el espíritu y el alma que nos contiene. En este Planeta se habla del mundo del espíritu en forma turbia, imprecisa, como fruto de un proceso de manipulación de las mentes. Si se habla de espíritu, o se cae en el ámbito de las religiones de poder, lejanas del verdadero mensaje de los Maestros encarnados en la Tierra, Cristo en primer lugar, o se llega a la deriva de las contradicciones del movimiento new age, refugio de quienes han rechazado en apariencia su pertenencia al poder de la Iglesia y que han abrazado un proyecto mucho más confortable de salvación hecho a medida imitando al final el modelo del fiel, esclavo de un gurú, o de un mensaje cómodo que contempla mil y una formas de evolucionar sin ningún esfuerzo, comparable con un hobby calmante que se puede ejercer en el momento adecuado para percibir las correctas vibraciones. Vibraciones y energías que quedan en contradicción cuando damos la vuelta a la esquina de donde vivimos y nos encontramos con un hombre anciano que pide limosna, o con un niño de 7 años que se prostituye con abogados, o con repugnantes burgueses al costado de los estadios de una gran ciudad.

Todo esto forma parte de un proyecto bien preciso, orquestado desde hace siglos por el poder: desinformar, oprimir, esclavizar la mente de las masas para producir riqueza para unos pocos e ilusión de riqueza para muchos. Esos muchos tendrán que trabajar toda su vida como esclavos para garantizarle el lujo y sus regalías a esos pocos ricos del Planeta. Al resto de la humanidad lo podemos ubicar en el centro de este cuadro terrorífico representado por los treinta mil niños que cada día mueren de hambre, por los millones de personas desesperadas que huyen de los escenarios de guerra siempre provocados por la mente infernal y enferma que decide el destino del mundo, por esos millones de zombies que viven en chabolas junto a los hoteles lujosos con grifería de oro. “Sabremos que nuestro programa de desinformación se ha completado cuando todo lo que crea un ciudadano estadounidense sea falso” declaró el director de la CIA William Casey en 1981. Hoy podemos verificar en la realidad que vivimos todos los días los efectos de una afirmación como esa.  

Sobre la existencia de la vida en el Cosmos y sobre la presencia de Objetos Voladores No Identificados el cuidadoso trabajo de manipulación llegó al máximo posible. Desde finales de mil ochocientos los servicios de inteligencia estaban al tanto de este argumento. Las civilizaciones de otros Planetas que visitan la Tierra han intentado muchas veces hacer contacto a través del ámbito diplomático, como se suele hacer por cuestiones de representación y de conocimiento entre Naciones y Pueblos, pero este camino quedó interrumpido por la negligencia de los Jefes de Estado que deliberadamente decidieron ocultar esta importante Verdad precisamente por los efectos que podría provocar esta revelación a nivel social, político, económico, espiritual, médico, militar, cultural, en todo el género humano. El temor de los poderosos de la Tierra frente a la cuestión extraterrestre fue expresado varias veces por esos mismos mandatarios, como por ejemplo Obama en la siguiente entrevista realizada en el año 2015 (https://www.youtube.com/watch?v=EYzRY2XpLBk) y las organizaciones reunidas en Davos para el World Economic Forum del año 2013. En esta sede se barajaba entre los factores de riesgo y de desestabilización social el descubrimiento de las civilizaciones extraterrestres. Justamente a causa de la falta de predisposición y a la hipocresía de los poderosos el medio de comunicación que utilizan los extraterrestres hoy en día pasa por los pueblos, por aquellos que en medio de la masa apática se destacan demostrando que poseen elevados valores éticos y morales: los contactados.

A lo largo de la historia de estas últimas décadas hemos visto experiencias verdaderas de contacto entre hombres y seres humanos multidimensionales, como por ejemplo las de Menger, pasando por Adamski, hasta llegar a Eugenio Siragusa, que nos han hecho llegar mensajes, advertencias, amonestaciones y llamados para colaborar con estas civilizaciones que son mucho más evolucionadas que la nuestra y que están dispuestas a ayudarnos. Ellos son los Ángeles de bíblica memoria, los mensajeros e instructores de civilizaciones que no han instituido religiones sino una nueva ciencia: la ciencia del espíritu aplicable en todos los ámbitos, incluso los más insondables, de la naturaleza humana. Entre las experiencias de contacto más profundas que estos seres han entablado se encuentra la de Giorgio Bongiovanni: siciliano, hijo del pueblo, que en la década del ’80 fue a vivir a la región de Le Marche como gerente de una empresa que tuvo que abandonar cuando su vida cambió radicalmente. Un amor por la verdad y por Cristo que al inicio se concretizó a través del estudio y de la difusión del mensaje extraterrestre, gracias a su guía espiritual, Eugenio Siragusa, y luego cuando recibió la llamada de la Virgen María para dirigirse a Fátima en Septiembre de 1989. En ese momento la Madre de Cristo le dio los estigmas y su próxima misión: divulgar en todo el mundo el Tercer Secreto de Fátima, revelar la naturaleza mesiánica de la visita extraterrestre y el Retorno de Cristo a la Tierra, así como también desenmascarar al anticristo.

Desde entonces han pasado muchos años y han ocurrido muchas cosas en la vida de Giorgio, al igual que en la vida de las personas que desde el principio lo apoyaron y de las que renegaron su historia y su mensaje. También han ocurrido numerosos acontecimientos históricos y sociales, muchos de los cuales habían sido revelados al mismo Giorgio, y antes que él a Eugenio Siragusa, por las inteligencias cósmicas.

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Durante la conferencia Pier Giorgio presentó su historia a los presentes, las imágenes de la sangración de los estigmas sagrados que reiteran aún más un llamado a la colaboración y de esperanza para aquellos pocos que aún tienen un corazón puro en la Tierra y que al menos intentan poner en discusión su existencia y adaptarse a los parámetros de una Ley superior que puede liberar realmente al hombre de sus miserias humanas y espirituales. Al escuchar la historia del estigmatizado de Fátima, que acusa al poder y que durante muchos años ha vivido en Sant’Elpidio a Mare, algunas personas se levantaron... perecía como que no podían soportar a una figura como esa que a lo sargo de los años ha sacudido la mente de la gente bien, a la que le gusta acumular riquezas en la Tierra, llenando sus vidas con cosas fútiles y con pedazos de papel que no podrán utilizar en el momento de dejarla. Muchos otros se quedaron literalmente pegados a las sillas para poder saber más sobre las grandes explicaciones ofrecidas por Pier Giorgio, un hombre al servicio del cielo.

La energía en la sala era casi palpable, las informaciones y los datos fluían para luego convertirse en reales. Era como si en un determinado momento estuviéramos asistiendo a una toma de conciencia colectiva entre los presentes y allí, en esos casos, la emoción se convertía en un río que se materializaba en el rostro de los más sensibles. Un cirujano anciano, a pesar de su sufrimiento físico, por un instante parecía ser un niño conmovido y se convirtió en canal de toda la emoción de los presentes que reconocían en esas palabras que el cielo ofrecía una Verdad capaz de cambiar y plasmar vidas enteras.

El espíritu bien predispuesto sabe distinguir lo que está bien de lo que está mal, lo falso de lo verdadero y sabe discernir, aunque sea por breves instantes, sobre el flujo profundo de la Verdad que nos compara a Dios y que manifiesta nuestra real naturaleza de seres espirituales que han llegado a esta Tierra para evoluciona a través del conocimiento de las Leyes Universales y de la Ciencia del Espíritu entendida como un verdadero pasaporte para una evolución rápida y no como una coacción para nuestro libre albedrío.

Cuando logremos comprender que la evolución de nuestros espíritus y, por lo tanto, también de la materia que manejamos pasa por el estudio de dichas Leyes, podremos esperar finalmente en el hecho de alcanzar una condición de equilibrio y de felicidad duradera incluso en esta dimensión de contradicciones y de dolor. Entender los mecanismos que ponen en marcha a la Ciencia del Espíritu, ser conscientes de las causas y saber leer los efectos de nuestras acciones es la clave que nos lleva a vivir una existencia llena de amor, de sabiduría y de servicio al Espíritu Santo encarnado en Cristo. Un ser inmenso al que tenemos que honrar y respetar en cada instante de nuestras vidas siendo conscientes de lo que somos, de que no somos fieles sino que somos estudiosos de la ciencia y que Él nos trajo. Solo así podremos comprender un poco ese amor Suyo y liberarnos de todo sufrimiento, comprendiendo lo que la ha generado.

Esta verdad es lo que estoy aprendiendo a lo largo de mi camino de iniciación. Un camino dificultoso y tortuoso, que implica una renuncia radical a lo que era y que exige un sabio abandono de los modelos que hasta ahora me han permitido sobrevivir en el mundo. Modelos limitados, plasmados por una idea social a la que hoy en día rechazo y que es la causa de la tremenda ira de Dios que pronto se desencadenará en el mundo. Pero todo esto es a cambio de un horizonte majestuoso al que puedo llegar a aspirar: la evolución, la comprensión y el amor en el servicio. El ascenso hacia Dios.

Espero poder permanecer siempre fiel a mi ideal.

“Es muy cierto que. cuanto más nos elevamos en la escala, tanto más cerca nos encontraremos de la mente del Padre y tanto más evidente se hace la naturaleza ilusoria de las cosas finitas, pero hasta que el TODO no nos absorba finalmente dentro de El mismo no se desvanecerá la visión. De manera, pues, que no necesitamos basarnos en esa ilusión. Reconozcamos más bien la verdadera naturaleza del Universo y tratemos de comprender sus leyes mentales, esforzándonos en emplearlas en la forma más efectiva para nuestro progreso ascendente en toda la vida, conforme vamos viajando de un plano al otro del ser. Las leyes del Universo no dejan de ser “leyes de hierro” aunque sean de naturaleza mental. Todos, excepto el TODO, están sujetos a ellas” El Kybalion.

En Cristo, el Espíritu Santo, nuestro Maestro y Rey del Universo.

Marco y Francesca
3 de Abril de 2017