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caza_01FRANCIA Y GRAN BRETAÑA QUIEREN MAS ACCION DE LA OTAN
PARIS y LUXEMBURGO, 12 (ANSA) - Francia y Gran Bretaña reclamaron a la OTAN intensificar operaciones

militares en Libia, pero la Alianza Atlántica desestimó esa posición mientras los grupos rebeldes pidieron armas y acusaron a Muammar Kadafi de matar a 10 mil personas desde el inicio del conflicto, en febrero. El canciller francés, Alain Juppé, manifestó en París que "la OTAN debe jugar plenamente su rol, quiso tomar la conducción de las operaciones, nosotros lo aceptamos", por lo cual debe "evitar que Kadafi use armas pesadas para bombardear a la población".

 

En tanto, el canciller británico, William Hague, exhortó a la OTAN a "intensificar sus esfuerzos en Libia", en declaraciones realizadas al ingresar a una reunión del Consejo de Exteriores de la Unión Europea, en Luxemburgo.
Pero la OTAN respondió que cumple su tarea en Libia "en forma adecuada", sin disminución de operaciones bélicas, y mantiene como prioridad las ciudades de Misurata y Ajdabiya.
El jefe del cuartel general de la OTAN para Europa, brigadier general Mark Van Uhm, opinó que se realiza "un gran trabajo".
A su vez, la portavoz de la Alianza, Carmen Romero, dijo que desde la asunción del comando en Libia "el ritmo de las misiones no disminuyó" y ratificó que la prioridad son las ciudades de Misurata y Ajdabiya, ambas en poder de la oposición armada, en combate con las fuerzas gubernamentales.
Los grupos rebeldes libios, entretanto, pidieron armas a Italia, Francia y Qatar, los tres países que reconocieron al Consejo Nacional instituido por la oposición.
La solicitud fue reportada por el portavoz del Consejo, Abdel Ghogha.
"Pedimos a los países que reconocieron el Consejo Nacional de Transición (CNT) armas y equipamientos", declaró Ghogha. Italia consideró que la resolución de Naciones Unidas, a pesar de que impone el embargo de armas al país, "no excluye" la entrega de armamento a los grupos rebeldes armados para sistemas de "defensa", afirmó hoy el canciller, Franco Frattini, en Luxemburgo. Además, al contrario que Francia y Gran Bretaña, el canciller italiano defendió la labor de la OTAN, así como el secretario de Estado español para la Unión Europea, Diego López Garrido.
Por otro lado, prosiguieron hoy denuncias sobre el incremento de los muertos y la situación humanitaria en varias ciudades, entre ellas Misurata. El representante del Consejo Nacional opositor, Ali Al Isawi, aseguró hoy que las tropas de Kadafi mataron hasta hoy a 10 mil personas en los combates. Tras finalizar el encuentro de cancilleres en Luxemburgo, Al Isawi aseveró que los "civiles asesinados por Kadafi" desde el inicio del conflicto fueron "10 mil", mientras "otros 20 mil están desaparecidos y 30 mil fueron heridos", 7 mil de ellos de gravedad. Por su lado, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, reportó hoy que más de 500 personas, en su mayoría de etnia bereber, huyeron la semana pasada de la región occidental libia para buscar refugio en Dehiba, sur de Túnez, a 200 kilómetros de la frontera de Ras Adjir. Con respecto a la situación de Misurata, también la oposición libia demandó hoy a la comunidad internacional que detenga la masacre de civiles en esa ciudad, donde las tropas de Kadafi preparan "un ataque devastador en las próximas horas" y "quieren impedir" el arribo de ayuda humanitaria.
Misurata, en el oeste del país, se encuentra en una situación "extrema", sin "electricidad, agua, sin ningún tipo de servicio público activo", dijo el responsable del Consejo en la ciudad, Suleiman Fortia.
Mientras, la guerra continúa. Las fuerzas del gobernante libio, en efecto, bombardearon hoy la periferia oeste de la ciudad de Ajdabiya, en el este. Testigos dijeron que se escucharon al menos ocho explosiones en esa zona de la ciudad.
Otros combates entre las tropas de Kadafi y la oposición se produjeron en la región de Zenten, al suroeste de Trípoli, una zona montañosa en la que ayer la OTAN anunció haber destruido cuatro tanques del gobierno. "Esta mañana las fuerzas pro-Kadafi buscaron cortar la carretera entre Zenten y la frontera tunecina al oeste", al posicionar una serie de vehículos armados en la montaña a unos 15 kilómetros al oeste de la ciudad en manos de los rebeldes, dijo un testigo. Pero los opositores los atacaron y los siguieron hasta Harabah, a unos cien kilómetros al oeste, donde las tropas de Kadafi se atrincheraron e intercambiaron golpes de artillería, añadió otro testigo. ACZ
12/04/2011