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HOMENAJE A EUGENIO SIRAGUSA EN LA PLATA

Entre los argentinos no hay razones para el paréntesis, cuando se trata de poner el hombro y el alma, para la obra del Cielo. Pero lo que es mejor aún: sobran los motivos para el emprendimiento. Sobra ese entusiasmo a flor de piel que los enaltece y que los catapulta hacia una mejor comprensión de la obra con la cual están comprometidos, algunos desde hace 17 años, otros desde hace dos años y otros desde hace pocas semanas. Con ese ímpetu, propio de los bonaerenses, organizaron entonces una conferencia en la ciudad de La Plata –capital de la Provincia de Buenos Aires, Argentina- dando la posibilidad de conocer “La Profecía”: un voluminoso y exclusivo material gráfico y testimonial sobre la presencia extraterrestre. Un audiovisual que fue relatado personalmente por Giorgio Bongiovanni. Pero además, y no por casualidad, se sumó a esa entrega audiovisual –de ribetes inéditos- el homenaje a Eugenio Siragusa con la exhibición de dos documentales elaborados expresamente: uno en Italia y otro en Montevideo. Pero esta conferencia, del día domingo 24 de setiembre del año 2006, en el Teatro Luz y Fuerza, fue mucho más que un nuevo encuentro entre hermanos. Esta conferencia, en resumidas cuentas, fue una sincera manera de demostrar, sin contratiempos, ni obstáculos, cómo los sentimientos y el amor pueden dar forma a una maravillosa energía, sensible y al servicio de un espíritu elevado como ha sido y es el de Eugenio Siragusa, especialmente a la hora de su despedida, a la hora de rendirle homenaje. No fueron minutos de indiferencia. Fueron minutos de reencuentro con su vibración, con su esencia... con su hijo espiritual Giorgio, vale decir, con el fruto de su amor al Cristo, de su disponibilidad al Maestro y de sus enseñanzas. Fueron minutos en los cuales, las emociones predominaron superando las expectativas espirituales, de lo que podría ser una de nuestras habituales conferencias. Una platea sensibilizada al punto tal, que al paso de Giorgio, a la hora de retirarse del Teatro, no fueron pocas las manifestaciones de reconocimiento hacia Giorgio, de personas que años atrás habían mantenido correspondencia con su padre espiritual, precisamente por haber tenido la posibilidad de vivir juntos una velada cargada de tanto amor dirigido al mismo personaje. Lagrimas, abrazos, expresiones de ternura hacia el estigmatizado. Unos segundos de oración, del Padre Nuestro. Unos segundos de reflexión. La emocionada intervención de Juan Alberto Rambaldo. El trabajo entusiasta y coordinado de los integrantes del Arca de Buenos Aires. Frutos y más frutos en un camino de pacificación y de justicia. La convicción y el amor en las palabras de Raúl Bagatello, hablando de sus niños de la pre-cordillera andina, cuyo sufrimiento continúa enseñándonos. Y no puedo dejar de destacar la reunión de Arca, en el Hotel Bauen, el sábado, precediendo la conferencia en el Teatro, como preámbulo indispensable para encarar la actividad prevista para el atardecer de la jornada dominical. Cada minuto de disponibilidad y de entrega de los hermanos argentinos continúa siendo un bálsamo para el instrumento del Cielo. Cada una de nuestras vivencias van sumando perlas y más perlas... Porque el Amor al Cristo, va uniéndonos segundo a segundo, como el primer día...

Jean Geoges Almendras
La Plata, Buenos Aires -
Argentina 23 y 24 de setiembre de 2006